¡Teléfono Bernabei ! Mugre en las calles y potencial criadero del mosquito Aedes aegypti

A pesar de las medidas de prevención y concientización sanitaria sobre el dengue y su vector, el mosquito Aedes aegypti, aconteció el primer caso autóctono en General Pueyrredón. Con preocupación, las autoridades locales activaron diversos protocolos para evitar más contagios. Sin embargo, en retrospectiva, ¿fueron bien ejecutadas y planificadas las acciones de prevención y concientización?, ¿fueron las necesarias y suficientes?

En las últimas semanas, funcionarios, autoridades municipales y especialistas han enfatizado la necesidad de controlar la situación mediante el descacharreo, fumigaciones y el mantenimiento de espacios. Además, han instado a los vecinos a comprometerse con estas medidas de prevención.

Desde “el Retrato…”, recorrimos algunas calles de Mar del Plata. En pocas cuadras marplatenses, se advierten diferentes situaciones que pueden propiciar el desarrollo del mosquito Aedes aegypti y sus larvas. Los amontonamientos de hojas, pasto y ramas pueden convertirse en criaderos potenciales, más aún si acumulan agua. Así, se crean condiciones ideales para que las hembras del mosquito depositen sus huevos.

Las acciones realizadas para concientizar a la sociedad y solicitar su compromiso con las medidas de prevención, son útiles. Pero no pueden ser el caballito de batalla de una comunidad para enfrentar una enfermedad que se propagó de forma exponencial durante las últimas semanas.

Tras descubrirse el primer caso autóctono, las autoridades locales señalaron que intensificarán las medidas de control y prevención en las áreas dónde estuvo y se movilizó el vecino infectado. Sin embargo, ¿era necesario esperar a que suceda un caso autóctono?, y, si se pone el foco en esas zonas, ¿qué pasará si el vector ya se encuentra en otro lugar de la ciudad?, ¿se reforzarán las medidas en ese nuevo lugar?

La detección del primer caso autóctono de dengue en General Pueyrredón recuerda la importancia de la prevención y la concientización en la lucha contra esta enfermedad. Asimismo, es fundamental una acción constante y coordinada para eliminar los criaderos de mosquitos y reducir el riesgo de contagio.