El intendente de la Ciudad de Mendoza es el principal “larretista” dentro de Cambia Mendoza. Sus argumentos a favor del precandidato a presidente, por los que afirma que hay que votarlo.
Acompaño a Horacio y su visión del cambio que necesita la Argentina, porque las transformaciones que vienen requieren de liderazgo, experiencia y equipos sólidos de gestión.
Además, en estos 4 años que hemos coincidido, él gestionando la Ciudad de Buenos Aires y yo la Ciudad de Mendoza, he podido constatar la impronta y la fuerza de Horacio para transformar la realidad.
Hoy no se trata de voluntarismos y consignas vacías. No alcanza con slogans. Argentina tiene problemas estructurales muy profundos, una pobreza creciente y una economía sin rumbo. Por eso el cambio no puede ser improvisado.
Horacio tiene equipo (hemos recibido estas semanas a cuadros como Quirós, Redrado y Lacunza en Mendoza), ejerce un liderazgo fuerte y es un hombre de acción, de decisiones todos los días. Y eso también nos une. Nos identifica.
Por eso coincidimos en la consigna “trabajar, trabajar y trabajar” y es lo que seguiremos haciendo con él como presidente de los argentinos a partir del 10 de diciembre.