El pasado 3 de septiembre, Ceciliana López, de 8 años, falleció estando en su casa, con su mamá, Natalia Etcheverry, de 46 años, la principal sospechosa de la muerte de la niña quien padecía epilepsia refractaria con Síndrome de West y un retraso madurativo.
El pasado miércoles 30 de noviembre, personal de la DDI detuvo a Etcheverry, en la vivienda familiar ubicada en Luzuriaga al 1200. La carátula del expediente es homicidio agravado por el vínculo, y la principal hipótesis fiscal, es que la muerte de la niña fue provocada adrede por su mamá, al haberle suministrado un cóctel con bebidas alcohólicas y drogas como MDMA (éxtasis).
La denuncia por averiguación de muerte la realizó dos días después del fallecimiento el papá de la niña, Carlos López, a raíz de un mensaje de whatsapp que recibió de su expareja, el mismo rezaba: “hasta acá llegué voy a cometer una locura, no puedo más”.
El fiscal subrogante a cargo, Ramiro Anchou, determinó la exhumación del cuerpo de la menor para realizar una autopsia que determinó muerte por “intoxicación medicamentosa estableciéndose una concentración elevada de alcohol en sangre y éxtasis”.
A raíz de esto, se ordenó el arresto de Etcheverry, y en la mañana del jueves se negó a declarar ante el Fiscal a cargo. “Hoy la defensa de la mujer decidió que no tenía que declarar, y es una facultad” sostuvo Anchou en diálogo con “el Retrato…”, así mismo agregó: “el entorno familiar, hay una hija mayor de edad que convivía ahí, pero la hipótesis apunta a la progenitora por el resultado de las pericias toxicológicas que se realizaron y el resultado de la autopsia”.
Finalmente, Anchou sostuvo que según manifestó Etcheverria, pese a no haber prestado declaración, no tenía consumos problemáticos, ni adicciones de este tipo. “Los médicos concluyen que puede ser accidental u homicida la etiología del caso, por ende estamos recabando los testimonios y las pericias necesarias”, sentenció.