Emotivas palabras del Ingeniero Horacio Tettamanti al entregarle una plaqueta a Dell Olio

El ingeniero Horacio Tettamanti brindó un sentido testimonio al hacer entrega de una plaqueta al ingeniero Mario Dell Olio, destacando una trayectoria marcada por el compromiso, la lealtad y una visión estratégica que dejó obras y decisiones que hoy son orgullo no solo de Mar del Plata, sino de todo el país.

Tettamanti, fundador de SPI, empresa señera que desde Mar del Plata se consolidó como referencia nacional en ingeniería,, remarcó que tanto la firma como sus hacedores “siempre alzaron la voz en distintos foros para aclarar, exponer y defender el interés nacional, con la mirada puesta en el desarrollo de un país que necesita nuevos desafíos”.

Al tomar la palabra, acompañado por Sandra Cipolla,  el ingeniero recordó el llamado que lo convocó al homenaje: “Cuando José Luis Ovcack me llamó para invitarme, uno sabe inmediatamente la importancia del momento. Rendir homenaje a Mario Dell Olio es algo a lo que no se puede decir que no”.

Con casi cuarenta años de vínculo personal y profesional, Tettamanti subrayó dos rasgos que, a su entender, definen la figura del homenajeado: “compromiso y lealtad”. “Gracias Mario por esas dos cuestiones: una lealtad inquebrantable y un compromiso permanente”, expresó alnte el público.

En su testimonio, señaló que muchas de las contribuciones de Dell Olio no siempre fueron visibles, en parte por “un exceso de humildad” que impidió dimensionar la magnitud de su legado. “En esos hechos que pasan desapercibidos se muestra el verdadero corazón de las personas, y Mario ha sido fundamental en muchísimos de ellos”, afirmó.

Uno de los momentos más intensos del relato fue el recuerdo de la gestión municipal compartida durante ocho años, atravesada por crisis complejas que pusieron a prueba a la ingeniería y a la política. Entre ellas, evocó la grave crisis hídrica que dejó a la ciudad varios días sin agua, cuando “los ingenieros tuvimos que cerrar filas”, con Dell Olio como responsable técnico.

Pero el pasaje más contundente estuvo vinculado a la que definió como “la obra de saneamiento más importante de la historia argentina”. “Estuvimos al borde de no poder continuar. Era una decisión que implicaba jugar todo a cambio de nada”, recordó. Y agregó: “Hoy la ciudad tiene esa obra porque hubo un político que arriesgó su carrera y, detrás, un ingeniero que puso todo lo que tenía que poner”.

Tettamanti también destacó el rol decisivo de Dell Olio en la recuperación del Puerto de Mar del Plata, donde fue el primer gerente del Consorcio: “Dejó las cuentas en orden, con superávit, transparencia y una dignidad extraordinaria. Nos dejó el puerto que tenemos hoy”.

Finalmente, subrayó un legado estructural y silencioso: la creación de la carrera de Ingeniería Naval en la UTN Mar del Plata. Cuando nadie creía posible que la ciudad fuera referencia, Mario la fundó desde cero. Hoy, el 70% de los ingenieros navales del país se forman aquí”, concluyó, sellando un homenaje que resonó como un agradecimiento colectivo.