En el marco de la movilización realizada en Mar del Plata, mientras el Congreso de la Nación debatía un paquete de leyes que amenaza con modificar de manera profunda el esquema laboral argentino, Enrique “Quique” García, recientemente electo Delegado de la Seccional Sudeste de la UATRE, expresó su preocupación por el impacto que estas iniciativas tendrían sobre el movimiento obrero y, en particular, sobre los trabajadores rurales y del sector avícola.
“Hoy estamos marchando junto a los trabajadores en una movida muy especial, porque mientras nosotros estamos en la calle, en el Congreso se están tratando leyes que van a hacer desaparecer gran parte del movimiento obrero”, señaló García, destacando el carácter federal de la protesta. Según explicó, la inquietud no fue exclusiva de Mar del Plata sino que se replicó en distintos puntos del país. “Era una preocupación global, no solo acá. Desde el norte hasta el sur, todo el país de la UATRE se movilizó hacia Buenos Aires, y en otros lugares, como hicimos nosotros hoy, se salió a los pueblos y ciudades para manifestarse”, agregó.
El dirigente sindical remarcó que, pese a intentar cuidar a los trabajadores para no generar un desgaste excesivo, la coyuntura actual los empuja a salir a la calle. “A veces uno intenta no exponer a los compañeros, pero lamentablemente están pasando cosas en el país que desbaratan todo. Por eso hoy no quedaba otra que movilizar”, afirmó. En ese sentido, sostuvo que las idas y vueltas en el tratamiento de la ley generan aún más incertidumbre: “Nos llegó la noticia de que el tema se llevaría a febrero. Eso demuestra que ni siquiera ellos están convencidos de lo que están haciendo”.
Uno de los puntos más sensibles que mencionó García fue la situación del sector avícola, duramente golpeado por las políticas actuales y la apertura de importaciones. “Se está hablando de intercambio con China, de traer pechuga de pollo desde afuera. Eso es un problema explosivo para nuestra actividad”, advirtió. Según relató, esta realidad ya se traduce en amenazas concretas de despidos en Mar del Plata: “En un supermercado muy importante había cerca de 30 trabajadores que querían venir a la marcha, pero no pudieron. A 24 ya les avisaron que el despido está en la puerta”.
Finalmente, García definió el presente como un año extremadamente complejo en lo social y laboral. “Es un año duro, muy difícil. Los compañeros están predispuestos a dar la lucha, porque lo que este gobierno está haciendo con los gremios, con lo social y con la reforma laboral no se justifica desde ningún punto de vista”, concluyó, reafirmando el compromiso de la UATRE con la defensa de los derechos de los trabajadores.