Una masiva participación de marplatenses marcó este jueves la concentración y posterior marcha realizada en el centro de la ciudad, en el marco de la jornada nacional de protesta convocada por el movimiento obrero contra la reforma laboral impulsada por el presidente Javier Milei y sus aliados parlamentarios. Mientras tanto, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la conducción nacional de la CGT encabezó un acto central en Plaza de Mayo, con la presencia de regionales de todo el país, entre ellas la de Mar del Plata.
En el plano local, las dos CTA, la CGT Regional Mar del Plata-Batán y numerosas organizaciones sociales, sindicales y políticas se concentraron frente a la Catedral para visibilizar su rechazo a una iniciativa que, según denunciaron, implica una profunda regresión en materia de derechos laborales y previsionales. Desde allí, columnas de trabajadores y trabajadoras se movilizaron por las calles céntricas, en una postal que evidenció el fuerte malestar social frente a las políticas del Gobierno nacional.
Miguel Guglielmotti, secretario adjunto de la CGT Regional Mar del Plata-Batán, destacó el alcance de la convocatoria y el impacto de la movilización. “El movimiento obrero ha sabido responder a la convocatoria. Están las tres centrales de nuestra ciudad juntas, con nuestros sindicatos, en una jornada nacional de protesta que ha tenido distintas manifestaciones a lo largo y ancho de la República Argentina”, afirmó.
Guglielmotti remarcó además que la presión ejercida en las calles logró frenar el tratamiento exprés de la reforma laboral en el Senado. “Nuestro punto de encuentro es la calle, y sirve, porque acabamos de enterarnos de que Patricia Bullrich, presidenta de la Comisión de Trabajo del Senado, trasladó la discusión de la reforma laboral para el 10 de febrero de 2026. No fue una decisión voluntaria: lo que pretendían era tratar esta reforma a libro cerrado el 26 de diciembre, pero el movimiento obrero organizado logró, con concentraciones en todo el país, que esta discusión se dilate”, subrayó.
Por su parte, Raúl Calamante, referente del Movimiento Derecho al Futuro y actual coordinador regional del Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, puso el foco en el contexto económico que atraviesa la ciudad. “Cualquier reforma laboral en estos tiempos debería ayudar a generar puestos de trabajo, y hoy estamos atravesando una economía que los destruye”, señaló.
Asimismo, alertó sobre el avance contra el sistema previsional. “Se busca crear un fondo de despidos financiado por los propios trabajadores con recursos que deberían destinarse a la Anses, lo que implicaría un desfinanciamiento de casi 2.500 millones de pesos anuales”, denunció.
En tanto, la concejal de Unión por la Patria, Valeria Crespo, calificó la iniciativa como “una reforma laboral regresiva que arrasa con muchísimos años de conquistas de derechos”. “Se le miente a la gente diciendo que el banco de horas es beneficioso, cuando en realidad permitirá jornadas de más de ocho horas sin el pago de horas extras”, sostuvo, y remarcó que “es fundamental ganar las calles para demostrar que el pueblo está en contra”.
Finalmente, Edgardo Díaz, referente de Radicales en Unión por la Patria, concluyó: “No se trata de una reforma, sino de una quita de derechos que busca transferir miles de millones de dólares a los empresarios y desfinanciar la caja previsional de la ANSES. Debemos seguir en la calle mientras el gobierno de Milei continúe vulnerando los derechos de los trabajadores y jubilados de todo el país”.
