
Vecinos y comerciantes de la zona del Puerto expresan su creciente malestar ante la presencia de un puesto callejero de choripanes y gaseosas instalado en la esquina de Acha y El Cano. Señalan que la actividad, además de ser ilegal, representa un riesgo para la salubridad pública y la seguridad vial.
Según denuncian, el puesto fue reportado once veces en los últimos dos meses ante el Delegado Municipal, sin obtener respuesta efectiva. Además, fue denunciado en dos oportunidades en Inspección General, organismo que hoy tiene como titular electo al concejal Marcelo Cardoso.
Los comerciantes de la zona se sienten desamparados y discriminados. “Nosotros pagamos todo: TSU, ARBA, alquiler, tasas de inspección, ART, luz, gas, OSSE, VEP, cargas sociales… y este ‘comercio’ solo paga coimas”, declaró un frentista. Afirman que la permisividad de las autoridades fomenta la competencia desleal y pone en jaque el esfuerzo del comercio formal.
Además del perjuicio económico, los vecinos advierten sobre condiciones de higiene precarias y manipulación de alimentos en plena vía pública, sin controles sanitarios ni habilitación correspondiente. Exigen respuestas urgentes por parte del Municipio y el cierre inmediato del puesto clandestino.