
En medio de un contexto enrarecido, ante las amenazas de eventuales incidentes, el presidente de la Nación, Javier Milei, encabezó el cierre de campaña de las fuerzas del cielo en el municipio bonaerense de Moreno, donde marcó la estrategia de la administración nacional ante el último escándalo que sacude al Gobierno, el supuesto pedido de coimas en discapacidad, en el que se encontraría involucrada su hermana Karina.
Es que, luego de la filtración de los audios del ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Diego Spagnuolo, donde revela un supuesto esquema de corrupción, la administración mileísta no supo dar una respuesta contundente. Hasta que el Ministerio de Seguridad denunció una supuesta red de espionaje ilegal, desviando la atención de las coimas per se, adoptando una narrativa donde la administración nacional es víctima.
En ese contexto, este miércoles, con la locación elegida, un precario club que no contaba con las medidas de seguridad para recibir a la comitiva del presidente, Milei volvió a reforzar la narrativa de que su hermana, principal protagonista del escándalo de las coimas, fue víctima de una red de espionaje ilegal, luego de que se filtrarán audios de Karina en la Casa Rosada.
“Quiero agradecerle al jefe, a mi hermana, Karina Milei, por haber organizado el partido a nivel nacional y por acompañarme a diario en esta lucha por las ideas de la libertad. A pesar de las injurias y operetas que vomitan desde los rincones más oscuros de la política todos los días“, afirmó el Presidente visiblemente molesto y agregó: “Hacen esto de manera muy grosera, estas operaciones que después se terminan cayendo”.
Acto seguido, Milei dejó claro el segundo pilar de la narrativa libertaria, que se mantuvo durante toda la campaña, la polarización a ultranza con el kirchnerismo. “A ellos no les importa ensuciar porque están todos sucios. Claramente te quieren llevar al barro porque ahí te sacan ventaja porque ellos ya saben, son de ahí, pero no lo van a lograr, porque se están despertando y tienen consciencia de lo que están haciendo”, fustigó.
“Cuando viene todo este tipo de operaciones y uno sigue luchando porque sabe que uno está limpio, entonces proceden a la intimidación física. Días atrás, en Lomas de Zamora me tiraron un adoquín. Podrían haber matado a cualquiera. Esto para ellos se trata de poder y si se tienen que cargar con vidas humanas no les importa. No se olviden que el kirchnerismo inmundo se cargó con la vida del fiscal Nisman”, afirmó el jefe de Estado.
Vale recordar que, el sábado pasado, en Lomas de Zamora, el presidente junto a su comitiva, compuesta por su hermana, el armador bonaerense Sebastián Pareja, y el primer candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, José Luis Espert, debió abandonar el acto que pretendía encabezar en Plaza Grigera, frente a la Municipalidad del distrito, luego de que manifestantes opositores le lanzaran piedras y botellas a la camioneta en la que se encontraban.

“Imagínense cómo deben estar las cosas en la provincia de Buenos Aires para que hayan hecho las tres operaciones todas juntas: trataron de acusarnos de chorros, fueron contra nuestras vidas y además se metieron con su hermana. Vaya que están asustados porque el domingo les vamos a pintar la Provincia de violeta”, anticipó Milei confiado por el resultado de las elecciones del domingo.
Ante la baja concurrencia, Milei pidió a “la gente de bien” que vaya a votar
El mandatario hizo especial hincapié en la importancia de ir a votar este domingo al remarcar que “cada voto vale muchísimo más que en una elección normal” y “un individuo puede hacer la diferencia”.
“El día de la elección van a redoblar las prácticas mafiosas que los caracterizan hace décadas con tal de arañar un par de puntos más”, advirtió Milei, tras afirmar que habría “un empate técnico” en los resultados, según las últimas encuestas.
En esa línea, en varias oportunidades a lo largo de su discurso, que intercaló con insultos dirigidos al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, el jefe de Estado pidió a su militancia y a la población que vayan a votar este domingo 7 de septiembre.
“Si vos no vas a votar, ellos ganan, nosotros no podemos quedarnos de brazos cruzados, este domingo anda a votar por tu familia, por tus amigos, como si el futuro de la provincia se definiera, porque es exactamente de lo que se trata”, arengó Milei.
Lo que sucede es que, en los comicios que sucedieron hasta el momento, en ocho provincias que también optaron por el desdoblamiento, la participación electoral promedió el 58%, casi 19 puntos menos que el promedio histórico del 77% para una elección de medio termino.
En efecto, hasta ahora, los porcentajes de participación variaron entre el 46% y el 65%. Ninguna provincia tuvo más del 70% de asistencia de su electorado. Formosa (65,8%) fue la provincia con el porcentaje más alto de participación, mientras que Santa Fe (46%) fue la de menor porcentaje.
“Las elecciones legislativas provinciales desarrolladas hasta ahora están perforando el piso de participación y marcando récords de deserción electoral”, explicó el director del Observatorio de la Calidad Institucional de la Universidad Austral, Marcelo Bermolén.
En ese contexto, en la Casa Rosada sostienen que la baja participación podría favorecer al oficialismo, respaldado en sus estructuras partidarias, frente a la militancia libertaria que ya no disponen del aparato del PRO que los apuntaló en 2023. Ante este escenario, el Presidente convocó a votar al mismo tiempo que agitó el fantasma del fraude electoral.
“La única propuesta que tienen es romper el modelo de Milei. Son tan huecos y vacíos que su única propuesta es destruir. Están dispuestos a hacer fraude a lo que sea y tenemos que luchar contra eso a capa y espada“, concluyó Milei frente a una turba de militantes libertarios que gritaba “hijos de puta”.