
Este sábado por la tarde, el Faro de la Memoria fue escenario de una emotiva jornada organizada por organismos de derechos humanos, con una destacada participación de vecinos , jóvenes y adultos. Irma Piñero, integrante de Familiares, relató que la actividad comenzó en el Archivo de la Memoria, donde se brindó una charla informativa sobre el funcionamiento del espacio y su importancia histórica.
Durante la tarde, se realizaron diversas actividades culturales y de expresión. “Pintamos pañuelos blancos con distintas leyendas, hubo un grupo barrial que hace música y cantó… fue realmente hermoso”, expresó Piñero. En un gesto de memoria activa, los asistentes se dirigieron luego hacia el predio lindero que, según denuncian, se pretende ceder a una gintonería. Allí, como forma de protesta y homenaje, colgaron en el alambrado los pañuelos intervenidos y pequeñas fotos con los ojos de personas desaparecidas durante la dictadura, vinculadas a ese lugar.
La jornada concluyó con una proyección audiovisual en el salón de actos del Faro, donde se mostró la historia del sitio y el trabajo del archivo. La actividad se enmarca en una creciente resistencia de los organismos de derechos humanos frente a proyectos que consideran una amenaza a la memoria colectiva y al valor simbólico del ex centro clandestino de detención.
“Estamos peleando para que este lugar siga siendo de memoria”, remarcó Piñero.