
En las últimas horas, el mutualista Raúl Escudero denunció públicamente que la dirigencia política de Tandil “le dio la espalda a los afiliados del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA)” y cuestionó la falta de gestión para resolver los problemas que enfrentan los 24 mil beneficiarios de la obra social provincial. Según afirmó, el Instituto mantiene una deuda de 23 millones de pesos con la mutual Amemt desde febrero, y todavía no se firmó un convenio que habilite la realización de estudios diagnósticos en el centro de salud de 4 de Abril y Las Heras.
Durante una comunicación con los medios locales, Escudero remarcó que la situación se ve agravada por la falta de respuestas concretas de la dirigencia local. “Se enojan, hacen pucherito, pero yo estoy más allá del bien y del mal”, expresó el dirigente, al tiempo que sostuvo que es necesario dejar de ocultar los problemas: “Entramos en una generalidad de hipocresía que no tiene sentido”.
En ese sentido, el dirigente sindical de Tandil criticó la intermediación de la nueva gerenciadora Asociación Civil de Establecimientos Ambulatorios y Policonsultorios Privados (Aceapp), a quien responsabilizó por el recorte en las coberturas médicas que afectan a los afiliados, y recordó que usuarios del sistema de salud provincial denunciaron que los profesionales ya no pueden realizar recetas con cobertura, y que los estudios médicos “no están siendo cubiertos en varios establecimientos de la ciudad”.
En ese contexto, una afiliada, Paola relató que al intentar obtener una receta con cobertura en la sede de IOMA en calle España, una médica le informó que no podía emitirla, y describió que había más de 20 personas “simulando trabajar” sin ofrecer una solución concreta, lo que desató su indignación. “Después quieren que no les digan ñoquis”, ironizó.
Claudia, otra afiliada de IOMA en Tandil, aseguró que los gastroenterólogos del Sanatorio atienden solo consultas, pero no cubren estudios solicitados por los pacientes. Al intentar conseguir turno en la Clínica Chacabuco, única opción para muchos usuario, le ofrecieron “recién para fin de mes”, y no pudieron garantizarle cobertura para los estudios. Esta situación deja a muchos vecinos sin atención, o con la única alternativa de pagar por consultas privadas.

Es preciso mencionar que, Tandil concentra uno de los escenarios más críticos en la provincia, ya que los afiliados solo pueden acceder a turnos y camas a través de la Clínica Chacabuco, que también está colapsada por la atención al PAMI. En este contexto, la Aceapp reemplazó a la polémica gerenciadora “23 de Diciembre”, que había sido señalada por múltiples irregularidades, pero los problemas persisten.
La falta de atención, la deuda a prestadores y la imposibilidad de realizar tratamientos o recibir prótesis, motivaron a Escudero a lanzar fuertes cuestionamientos. “Tener una gerenciadora es como tener una ruleta rusa. Si te sale el tiro, tenés que tener suerte para que te atiendan”, declaró otro afiliado.
Según testimonios recogidos por los medios de comunicación de Tandil, también hay atrasos en los pagos de IOMA a ortopedias y acompañantes terapéuticos, además de un listado interminable de profesionales afectados por la desatención de la provincia de Buenos Aires y la indiferencia de los políticos locales.
No obstante, Escudero reconoció que el cuadro de situación no es exclusivo de Tandil, ya que en otras ciudades de la provincia también se denuncian prácticas médicas restringidas, demoras prolongadas en turnos, falta de cobertura en medicamentos, abandono oncológico y bioquímicos que trabajan sin cobrar. Pese a esto, desde el entorno del IOMA aún no se ofrecieron soluciones estructurales para una crisis que parece extenderse.
Tandil: Escudero apuntó contra el PJ local por la falta de inclusión
Además del conflicto con IOMA, Escudero criticó la falta de participación de su agrupación Cambio Justicialista en el armado de listas del Partido Justicialista local, al afirmar que fueron excluidos del proceso de unidad y que no fueron convocados para discutir candidaturas ni proyectos de cara a las elecciones del 7 de septiembre.
“Estuvimos afuera de toda discusión, como si no existiéramos. Somos parte de la historia del peronismo de Tandil y fuimos marginados”, expresó el dirigente, dejando entrever que existen fracturas internas en el justicialismo local que aún no se saldaron.
En ese sentido, Escudero aseguró que mantiene su vocación política, pero que prefiere priorizar la defensa del acceso a la salud antes que involucrarse en disputas partidarias estériles. “La política no puede ser solo para ocupar lugares. Tiene que servir para resolver los problemas reales de la gente”, remarcó.
Con tono crítico, cerró afirmando que seguirá reclamando por los derechos de los afiliados y que la situación con IOMA no debe quedar invisibilizada. “Es momento de hablar claro y de exigir respuestas. No se puede seguir así”, concluyó.