Pablo Obeid no se ahorró críticas al “modelo Milei” y el “abandono” municipal

Pablo Obeid, senador provincial y ahora candidato a segundo concejal por Fuerza Patria en Mar del Plata, centra su campaña en confrontar el modelo económico de Javier Milei y denuncia el “abandono” de la ciudad por parte de la gestión de Guillermo Montenegro. El referente peronista defiende la unidad de su espacio y cuestiona la falta de servicios.

El senador provincial Pablo Obeid, referente de La Cámpora y con trayectoria en áreas de desarrollo social, es postulado como segundo concejal en Mar del Plata por la lista de Fuerza Patria. En un escenario de creciente polarización, Obeid delineó los ejes de su campaña, que se centran en una confrontación directa con el modelo económico del presidente Javier Milei y una dura crítica a la gestión del intendente Guillermo Montenegro.

En diálogo con “el Retrato”, Obeid afirmó que la propuesta de Fuerza Patria es “una de confrontar y ponerle un freno a Milei“. El candidato enfatizó que el “eje central tiene que ver con el modelo económico de Milei y eso es lo que derrama en la ciudad”. Esta postura se refuerza ante la confirmación de Montenegro como candidato a senador provincial, lo que, según Obeid, evidencia que el actual intendente “se está yendo” y “no tiene su cabeza puesta acá en la gestión”.

Calificó de la administración local de pésima

Obeid no escatimó críticas hacia la administración local, calificándola de “pésima” y señalando que “en seis años no se hizo absolutamente nada”. El referente peronista argumentó que los marplatenses “venimos padeciendo el abandono“, una percepción que, a su juicio, trasciende las filiaciones políticas. “Mar del Plata está más sucia, tiene el problema del transporte, y ni que hablar los problemas de la inseguridad”, enumeró, sumando a la lista los baches y la basura.

El candidato a concejal también apuntó a la agenda del Concejo Deliberante, que, según su visión, se enfoca en “negociados” y “excepciones de construcción“, como la habilitación de “torres de 35 pisos”, en lugar de cuidar los recursos de los vecinos para mejorar calles o la seguridad. Obeid denunció que la única discusión que impulsa el municipio es “poner plata en medios nacionales para el blindaje mediático que tiene el Intendente”.

La meta “es sacar a Milei en el 27”

La política económica nacional, según Obeid, afecta directamente a Mar del Plata, especialmente al sector turístico y comercial. La “planchada” de la economía y el valor del dólar provocan que “los turistas se vayan a Brasil y eso se siente“. El candidato hizo hincapié en la preocupación de los sectores hoteleros y gastronómicos por las bajas reservas y el bajo consumo, un impacto “altísimo” para una ciudad que depende en gran medida del comercio y de los millones de turistas que solía recibir. Para Obeid, la principal propuesta para reactivar la economía es “sacar a Milei en el 27” y “ganar la elección en la provincia de Buenos Aires para que no tengan la legitimidad ni las manos en el Congreso para seguir ajustando”.

Dura crítica a Acción Marplatense

Obeid fue contundente al afirmar que “la unidad ya se construyó” en el peronismo y que existe “una sola lista de Fuerza Patria en los 135 municipios de la provincia de Buenos Aires“. Explicó que esta lista es el resultado de un arduo trabajo donde todos los sectores, incluyendo el suyo, cedieron posiciones para lograr la unidad. Criticó a “algunos sectores”, en alusión a Acción Marplatense, que asegurando que “cuando les toca cobrar, encuentra buenos argumentos para la unidad y cuando no les toca cobrar, les parece que no y vuelve a su boleta corta vecinal”. Para Obeid, “la única boleta es la de Fuerza Patria, que representa la fuerza del peronismo , de Cristina , Massa y Axel también” .

Finalmente, Obeid se refirió a la presión impositiva municipal, señalando que el municipio “recauda en seguridad e higiene un montón y también recauda en la tasa del Emtur, y nada de eso vuelve en servicio para los comerciantes ni en buena seguridad“. Para el candidato, el problema no es solo la presión impositiva, sino la falta de servicios que el municipio “adeuda en términos de gestión” en estos seis años.