Integrantes de AFPPEM denuncian la crisis y la urgencia en materia de salud mental

La Asociación de Familiares de Personas con Psicosis y Esquizofrenia de Mar del Plata (AFPPEM) se pronunció tras el reciente incidente violento que involucró a un hombre con padecimiento mental, señalando la falta de presupuesto, atención pública deficiente y el estigma social como factores que perpetúan la vulnerabilidad. La organización exige la implementación efectiva de la Ley de Salud Mental y un abordaje integral para evitar la repetición de estos accidentes.

La Asociación de Familiares de Personas con Psicosis y Esquizofrenia de Mar del Plata (AFPPEM) ha emitido un comunicado y dialogado con “el Retrato” en respuesta al incidente ocurrido el 15 de julio, donde un hombre con problemas de salud mental robó un patrullero y provocó un choque múltiple. La asociación, compuesta mayoritariamente por mujeres, decidió pronunciarse ante la exhibición mediática del hecho.

Celina, referente de AFPPEM (quien prefiere ser identificada solo por su nombre de pila para proteger la privacidad de sus familiares), explicó que la asociación nació de la experiencia compartida de familiares que han sido “víctimas de discriminación y estigma” en su búsqueda de atención para sus seres queridos. La situación se agrava por el alto costo de la atención psiquiátrica privada, que oscila entre $40.000 y $80.000 por consulta, dejando a la mayoría de las personas con trastornos mentales “a la deriva” en centros de salud y hospitales públicos, donde la atención y el seguimiento son insuficientes.

La Ley de Salud Mental 26.657, sancionada en 2010, establece un marco de derechos humanos para la atención, pero su implementación enfrenta serios desafíos. Celina enfatizó que “no hay presupuesto para la ley de salud mental“, lo que conduce a que las situaciones de crisis se repitan y agraven. La internación, a menudo la única solución en momentos de descompensación o violencia, es una medida temporal que no resuelve el problema de fondo. “La persona sale a la misma situación de antes. No hay orientación para la familia, no hay seguimiento, no hay tratamiento en la post internación“, sostuvo.

La referente de AFPPEM indicó que en los centros de salud municipales hay un número muy limitado de psiquiatras, lo que hace que conseguir un turno sea “una locura”. En el hospital, a pesar del compromiso del personal, “no hay recursos, no alcanzan los profesionales que están, cuestan los seguimientos”. El momento crítico se presenta a partir de las 20:00 horas, cuando el área de psiquiatría cierra y las personas con brotes deben esperar en la guardia hasta la mañana siguiente, con el riesgo que esto implica para el paciente y su familia.

Desde la asociación, se promueve el psicoaprendizaje o psicoeducación para los familiares, con el objetivo de “trabajar para convivir con nuestro familiar enfermo”. Este enfoque se basa en tres pilares fundamentales para el tratamiento: la medicación (que consideran innegociable si está indicada), los apoyos psicológicos (acompañantes terapéuticos, psicólogos) y la psicoeducación familiar. “Con estos tres pilares que son los que nosotros hacemos hincapié, mejora la salud”, aseguró.

AFPPEM se reúne el primer y tercer sábado de cada mes en la Iglesia Pompeya, ubicada en Avenida Libertad 4045, de 9:30 a 12:00 horas. Estos encuentros, que no tienen carácter religioso ni partidista, buscan ofrecer un espacio de escucha, experiencia compartida y apoyo mutuo. La asociación, que lleva dos años funcionando y trabaja para obtener su personería jurídica, invita a las familias a acercarse para encontrar orientación y alivio en un camino que otros ya han recorrido.