
El fallecimiento de Brian Cabrera, un joven de 29 años en situación de calle, reaviva la discusión en Mar del Plata. Ana Laura Vulcano, integrante de la Mesa del Diálogo por la Dignidad de las Periferias de la Iglesia Católica, califica la situación de “escandalosa” y exige una “responsabilidad absoluta e indelegable” del Estado en sus tres niveles ante la creciente vulnerabilidad.
La ciudad se encuentra nuevamente conmocionada por la trágica muerte de una persona en situación de calle. Brian Cabrera, de 29 años, fue hallado sin vida la noche del martes en la zona de Pringles y Santa Fe. Cabrera, quien enfrentaba graves problemas de salud y un historial de consumo problemático de alcohol y otras adicciones, había sido asistido el día anterior por el SAME por problemas respiratorios y fiebre, pero se negó a ser trasladado a un hospital, una decisión que, bajo la Ley de Salud Mental, no permite la internación obligatoria sin consentimiento. Su fallecimiento, subraya la extrema vulnerabilidad de quienes viven a la intemperie.
Ana Laura Vulcano, integrante de la Mesa del Diálogo por la Dignidad de las Periferias de la Iglesia Católica, calificó la situación de “escandalosa” y “una tragedia”. En diálogo con “el Retrato”, Vulcano enfatizó que: “La gente en situación de calle no está porque quiere, son muchas exclusiones que han vivido en toda su vida, que muchas veces tienen que ver, con la salud mental”. La referente también denunció que hay “mucha violencia en la calle, mucha violencia desde todos los sectores, también desde lo público”, una situación que complica el abordaje y la confianza de estas personas en las instituciones.
La insuficiencia de los recursos y la responsabilidad del Estado
Vulcano reconoció los esfuerzos de organizaciones como La Noche de la Caridad y los hogares de la Iglesia Católica (Hogar Nazaret, Hogares de Cristo), pero subrayó que “es hasta ahí”. La demanda supera ampliamente la oferta: “Los paradores nuestros, el parador de la casa Nazaret, está rebalsado gente. La verdad no tenemos más lugar”.
La integrante de la Mesa del Diálogo destacó los recursos que la Iglesia Católica pone a disposición de forma gratuita en Mar del Plata para casos de adicción y salud mental, como la Casa de la Libertad y la Misericordia, el Hogar de Cristo Carlos Mujica, Comunidades del Sur Don Orione y el Galpón de Teresa en Vidal. Sin embargo, insistió en que la “responsabilidad absoluta e indelegable del Estado nacional, provincial y municipal” es fundamental.
Vulcano lamentó el impacto de la “deshumanización” y la difusión de videos que “hablan de fisuras, violentando a la gente que está en esta situación de vulnerabilidad”, lo cual complejiza el acercamiento y la confianza. “La violencia limita, la violencia excluye y lo estamos viendo con los resultados que tenemos. El abordaje no es echar, sino es hacernos cargo de esa situación de exclusión”