
La UCR bonaerense avanzó en la definición de su estrategia electoral de cara a los comicios del 7 de septiembre y aprobó la conformación de un nuevo frente político “alejado de los extremos que hoy gobiernan tanto la Nación como la Provincia”. La decisión fue adoptada este martes durante la Convención de Contingencia del partido, celebrada en la sede central de La Plata, en la que se debatió la política de alianzas y se formalizó un mandato para construir una alternativa de centro.
Con este paso, la conducción de la UCR bonaerense busca consolidar una propuesta política propia frente a la polarización entre el kirchnerismo y La Libertad Avanza (LLA), con quienes no habrá entendimientos electorales. En ese marco, se facultó a los presidentes del Comité de Contingencia, Miguel Fernández, y de la Convención, Pablo Domenichini, a rubricar eventuales acuerdos con partidos afines a la tradición democrática, institucional y progresista del radicalismo.
“La UCR bonaerense ratifica su vocación de construir una propuesta amplia y democrática, que convoque a otros sectores con quienes comparte la necesidad de superar la polarización y ofrecer una salida institucional, republicana y progresista para la Provincia”, expresaron sus principales referentes al término del encuentro.
En esa línea la UCR buscará articular un frente con la Coalición Cívica, el Partido Socialista, el GEN, sectores del monzoismo y del peronismo federal que responde al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.
Durante la convención también participaron los presidentes de los bloques legislativos, Diego Garciarena de la Cámara baja y Agustín Maspoli del Senado, quienes expusieron un informe del trabajo parlamentario previo a la discusión política de alianzas. Entre los radicales conviven dos posiciones: una minoritaria que evaluaba sumarse a la boleta libertaria que impulsa el PRO, y otra mayoritaria que apuesta por una opción de centro, con eje en la identidad radical.

“La conformación de un nuevo frente no puede prescindir del rol central del radicalismo bonaerense, por su historia, su territorialidad y su compromiso con una salida democrática y de consenso”, aseguró Miguel Fernández, al justificar el mandato que recibió junto a Domenichini. Ambos remarcaron que solo será viable un armado competitivo si hay “proyecto serio” y una representación institucional “proporcional a la fuerza de la UCR”.
La convocatoria se da en un contexto político marcado por el desdoblamiento electoral dispuesto por Axel Kicillof, que fijó la inscripción de alianzas para el próximo 9 de julio, la presentación de listas para el 19 de julio y la oficialización de boletas para el 8 de agosto. En ese marco, el radicalismo se prepara para competir con identidad propia y aprovechar las ventajas territoriales en los distritos donde gobierna, que actualmente conduce 27 intendencias bonaerenses.
Si bien la figura de Facundo Manes se había distanciado del armado partidario con la creación del espacio “Para Adelante”, en las últimas semanas se reactivaron conversaciones para un eventual regreso, como parte del nuevo frente político.