Jorge Castellano y la urgencia de obras de infraestructura ante el cambio climático

El Colegio de Ingenieros de la Provincia de Buenos Aires (CIPBA) se prepara para una jornada clave que tendrá lugar los próximos 3 y 4 de julio en el Gran Hotel Provincial de Mar del Plata. Bajo el título “Cambio Climático y los Nuevos Escenarios de Riesgo en el Manejo de Cuencas Hídricas”, el evento convocará a especialistas del ámbito público, académico y privado para analizar una problemática urgente: la adaptación de la infraestructura hídrica frente a fenómenos cada vez más extremos y frecuentes.

En diálogo con “el Retrato”, el presidente del CIPBA, Ing. Jorge Castellano remarcó que, aunque el cambio climático aún no ocupa el centro del debate político, su impacto en el diseño, mantenimiento y ejecución de obras es evidente. “Hay quienes sostienen que estos fenómenos siempre ocurrieron. Puede ser cierto, pero hoy se repiten con mayor intensidad y frecuencia. No podemos seguir diseñando sistemas de desagüe y saneamiento como si el contexto climático fuera el mismo de hace 30 años”, advirtió.

Desigualdad en la escucha y en la acción municipal

Uno de los principales desafíos, según el referente del CIPBA, es la interlocución con los distintos niveles de gobierno. “Nos gustaría tener más participación. Hay distritos donde los intendentes nos escuchan y trabajamos bien en conjunto, pero en otros la llegada no es la deseada”, explicó. Esta situación de disparidad, afirmó, es parte de lo que motiva la realización de jornadas como la que se desarrollará en Mar del Plata: generar conciencia sobre la urgencia de obras de infraestructura que respondan tanto al cambio climático como al crecimiento económico.

Desde el Colegio insisten en que la inversión en infraestructura debe ser una política de Estado, no una bandera partidaria. “El método, la forma o la financiación puede debatirse. Lo que no puede discutirse es que las obras tienen que hacerse”, subrayó. Para el CIPBA, la articulación entre el Estado nacional, las provincias, los municipios y el sector privado es fundamental para generar un “círculo virtuoso” que asegure desarrollo y resiliencia.

Ausencia de un plan nacional integral

Castellano fue tajante respecto a la falta de coordinación en las políticas públicas. “Hoy no hay un plan nacional que integre las necesidades de las provincias y los municipios. Cada nivel actúa por su cuenta y eso es lo más preocupante”, lamentó. En su visión, cualquier estrategia que no contemple a todos los actores y no tenga continuidad entre gestiones está condenada al fracaso.

Puso como ejemplo las reiteradas inundaciones en distintas zonas de la provincia, especialmente en el sur bonaerense. “Estuve en esos lugares por razones laborales. Lo que vi ahora es lo mismo que en 2015, 2019 y 2023. Cambian los gobiernos, cambian los funcionarios, pero los problemas son los mismos”, sostuvo. Por eso, insistió en que “el problema no es la falta de planificación, sino la falta de continuidad en su ejecución”

Producción y logística, también en riesgo

La falta de infraestructura adecuada no sólo afecta a las ciudades: tiene un impacto directo en la producción. “¿Cómo va a salir la producción del campo si los caminos rurales están intransitables por la lluvia?”, se preguntó. Para el dirigente, la infraestructura hídrica y vial es una condición básica para que la economía crezca y la logística funcione.

El país, agregó, necesita caminos que resistan las lluvias, canales que drenen con eficiencia y rutas en condiciones para transportar insumos y productos. “No hay manera de crecer si no se invierte en esto. Y es algo que necesita tanto planificación como ejecución sostenida”, puntualizó

Parálisis de obras: una problemática estructural

Consultado por “el Retrato” sobre el freno a la obra pública nacional, el titular del CIPBA dejó en claro que no se trata de un problema nuevo. “Esto no empezó con el gobierno de Milei. La desfinanciación de obras nacionales venía de antes. La diferencia es que ahora hay una decisión política clara de no continuar con esas obras”, explicó.

Desde el Colegio coinciden en parte con la postura expresada por el ministro Federico Sturzenegger, quien aseguró que la obra pública nacional como tal no debería existir. “Nosotros creemos que las obras deben ser ejecutadas por las provincias. Pero esto tiene que estar acompañado por una planificación y un financiamiento federal. No se puede descentralizar responsabilidades sin garantizar recursos”, sostuvo.

Planificación federal, ejecución provincial

El presidente del CIPBA argumentó que una política de infraestructura eficaz debe contemplar la naturaleza interjurisdiccional de muchas obras. “Un río que nace en Córdoba y termina en Buenos Aires necesita planificación conjunta. Si no, lo que no resuelve una provincia, lo termina pagando otra”, ejemplificó.

Para lograr soluciones sostenibles, el modelo debe ser federal, con intervención coordinada entre las provincias y la Nación. “Quién la financia, quién la construye, quién la gerencia… eso se puede discutir. Pero el diseño y la planificación deben ser federales y consensuadas”, sentenció.

Una discusión de fondo que sigue pendiente

Finalmente, el dirigente fue claro respecto a lo que considera el debate central: “Hoy no se discute a fondo qué modelo de país queremos. ¿Qué infraestructura vamos a priorizar? ¿Cómo la vamos a financiar? ¿Quién la va a controlar? Estas preguntas siguen sin respuesta”.

Y concluyó con una advertencia: “Si seguimos delegando responsabilidades sin acompañar con recursos, si seguimos sin continuidad entre gestiones, y si seguimos sin una mirada integral, vamos a seguir con los mismos problemas estructurales. Y cada lluvia nos va a seguir tapando el agua, literalmente”.