Con más de 4.000 profesionales inscriptos, Mar del Plata se convierte en sede del XXV Congreso de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), que se desarrollara hasta este sabado en el NH Gran Hotel Provincial.
Durante esta edición se llegó a un récord de asistencia para un congreso realizado fuera de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, reflejando el creciente interés en los temas abordados por la SADI, especialmente tras el impacto global de la pandemia de COVID-19. Así lo señaló Gonzalo Corral, médico especialista en infectología y director del comité local del congreso, en diálogo con el Retrato: “Nuestra sociedad ha cobrado una relevancia mayor desde la pandemia. Este año superamos ampliamente las expectativas de participación”.
Durante tres jornadas, expertos nacionales e internacionales disertan en conferencias, simposios y mesas redondas sobre una amplia variedad de temas, desde terapias innovadoras hasta el rol de la inteligencia artificial en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades infecciosas. Entre los ejes destacados de esta edición se encuentran: salud global, infecciones respiratorias, VIH y otras infecciones de transmisión sexual, multirresistencia antimicrobiana, infecciones asociadas al cuidado de la salud, y estrategias de prevención como la vacunación y la educación sexual.
Respecto a la situación epidemiológica actual de la ciudad, Corral aclaró que “no estamos atravesando una nueva ola de COVID en Mar del Plata, en realidad lo que estamos viendo es un nuevo brote o pico de enfermedades respiratorias, la gran mayoría de los casos corresponden, hoy por hoy, al virus de la influenza, la famosa gripe”.
Un nuevo brote que marca récord de casos de sífilis
Corral alertó sobre el aumento sostenido de casos de sífilis, enfermedad que muchos creen erradicada: “En realidad nunca se ha ido lamentablemente. Lo que estamos viendo es un brote que se viene marcando y año tras año desafortunadamente tenemos un nuevo récord de nuevos casos”.
En relación a las enfermedades de transmisión sexual, el médico aseguró que “si se hace un paralelismo con lo que significa, por ejemplo, las nuevas infecciones por VIH, que en Argentina las podemos contabilizar, son aproximadamente 6.500 nuevos casos por año, esa cifra se mantienen estables, cuando en realidad deberíamos tener cifras en descenso, porque son enfermedades prevenibles con métodos de barrera y posiblemente tenga que ver con algo multifactorial”.
En ese sentido, el especialista enfatizó la importancia de estrategias combinadas para la prevención de infecciones: “Es clave avanzar en educación sexual, en comunicación comunitaria, en el uso de métodos de barrera, y en el acceso al testeo. Además, en infecciones como el VIH, se está promoviendo el uso de la PrEP (una medicación preventiva para personas con alto riesgo) y el tratamiento precoz de personas con VIH positivo, lo cual reduce significativamente la transmisión”.
Al ser consultado por los factores de esta creciente propagación de enfermedades de transmisión sexual, Corral cree que tiene que ver con “el comportamiento de nuestra población, con relajación de las medidas de cuidado, el no uso de métodos de barrera y por otro lado también por la falta de testeo, la falta de los equipos de salud a las personas que están sintomáticas y por la falta de consulta de las personas sintomáticas que infectan a nuevas personas”.
Las potenciales estrategias para disminuir los contagios
En cuanto a las posibles estrategias a seguir para tratar de disminuir los contagios, explicó que “nunca una estrategia puede ser lo suficientemente buena como para poder eliminar cualquier tipo de enfermedad, es por eso que se trabaja en lo que es la educación sexual en los distintos niveles educativos, se debe trabajar en lo que es lo comunicacional acerca de la prevalencia de estas enfermedades en la comunidad y sobre el uso de los métodos de barrera”.
Corral subrayó que todas las personas sexualmente activas deberían incluir el testeo anual de VIH en sus chequeos de rutina, del mismo modo que se controlan otros indicadores como el colesterol. “Es parte del cuidado de la salud. Cuanto más se testea, más se diagnostica y más se trata. Y cuanto más tratamos, menos se transmite”, concluyó.