Ruidosa manifestacion de los Residentes del INAREPS que luchan por un salario digno

En sintonía con lo que sucede en distintos puntos del país, los residentes del Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur (INAREPS), ubicado a la vera de la ruta 88 en el ingreso a Mar del Plata, volvieron a manifestarse esta semana exigiendo mejoras salariales y condiciones laborales dignas. Se trata de un reclamo que lleva más de un año, y que se intensificó desde el cambio de gestión en el Ministerio de Salud de la Nación.

Desde septiembre del año pasado no tenemos ningún tipo de contacto con las autoridades nacionales”, denunció ante “el Retrato”, María Antonela Ferraro Bogán, residente de primer año en Terapia Ocupacional y vocera del grupo. Según explicó, durante la gestión del exministro Mario Russo se había aprobado un aumento del 35% con bonos no remunerativos, pero esa medida fue derogada horas más tarde por el actual ministro de Economía, Luis Caputo, bajo el argumento de que “no hay fondos”.

Con la asunción de nuevos funcionarios en Salud, la interlocución con los residentes quedó completamente cortada. “Lo único que pedimos es que nos escuchen y visibilicen nuestra situación. Somos más de 50 residentes, más de la mitad del personal asistencial del instituto”, remarcó Ferraro Bogán.(FOTO)

Actualmente, un residente de primer año percibe un sueldo de $797.000, y el aumento por año es de apenas un 10%. Una cifra que, según relatan, se diluye frente al costo de vida en Mar del Plata. “Yo tuve que volver a vivir con mi papá. Un alquiler representa más del 60% de mi sueldo”, contó la joven, quien estudió en la Universidad Nacional de Mar del Plata y apostó por la residencia como instancia de formación profesional y humana.

Las restricciones son múltiples: los residentes no pueden ejercer por fuera del hospital debido al “bloqueo de título”, están obligados a la dedicación exclusiva y, además, no cuentan con representación gremial. “Ni siquiera tenemos derecho a agremiarnos, es parte del reglamento nacional”, subrayó la vocera.

El trabajo, por otro lado, es intenso. Cada residente atiende entre 8 y 10 pacientes por día. Su jornada comienza por la mañana con atención clínica y continúa con actividades académicas, como investigación, clases, ateneos clínicos y planificación de sesiones. “Pasamos muchas horas en el instituto y también trabajamos fuera del horario, sin que eso se vea reflejado en nuestros ingresos”, explicó Ferraro Bogán ante “el Retrato”..

La situación no es aislada. En todo el país, residentes de hospitales como el Garrahan, el Posadas o el Ramón Carrillo enfrentan la misma problemática. La falta de políticas claras para el sector ha comenzado a generar renuncias: “Algunos compañeros ya se bajaron. Sacan cuentas y ven que no les alcanza para vivir. Aun teniendo vocación, no pueden sostenerlo”, lamentó, indicando que “ con ese salario se hace casi imposible vivir”, acotando que en su caso en particular “tuve que dejar de alquilar a irme a vivir con mis padres”

La lectura desde adentro del sistema es clara: la salud no está entre las prioridades del gobierno nacional. “Nos dicen que no hay plata, pero vemos sueldos de senadores de 9 millones. Entonces no es que no hay, es que se elige a quién sí y a quién no. La salud pública está quedando afuera”, concluyó Ferraro Bogán.

Mientras tanto, los residentes continúan organizándose en asambleas semanales junto a colegas de todo el país, evaluando nuevas medidas y esperando respuestas. El reclamo no es sólo por ellos: “Esto no afecta solo a los residentes. Si nadie quiere formarse en salud, en poco tiempo no va a haber profesionales en el sistema público ni en el privado. Y eso lo va a sufrir toda la comunidad”.

Al preguntársele que mensaje le daría a quienes estudian medicina , reconoció que “ yo me siento muy satisfecha con el trabajo que hago acá estoy sumamente agradecida con la formación que estoy recibiendo es hermoso, pero es un poco desolador y desgastante el hecho de que ni siquiera pueda, ni siquiera recibas una remuneración acorde al trabajo que haces pasamos muchas horas acá dentro dedicamos muchas horas por fuera, nos encanta nuestra tarea pero hay que vivir.

Finalmente cuando “el Retrato” le consultó acerca de cómo uiban a seguir son sus reclamos, la profesional señaló que “vamos a esperar  qué respuesta tenemos de parte de la institución y de parte de la autoridad del Ministerio. Nosotros estamos en constante comunicación con los residentes de otras instituciones como el Garrahan, el Posadas, el Ramón Carrillo del Sur y con otros hospitales de Nación . Tenemos asambleas, en este caso estamos son  semanales nos reunimos todos y acordamos líneas de acción.  Vamos a esperar a ver qué respuesta nos dan hoy y en caso de que no sea una respuesta satisfactoria vamos a seguir con  nuestras protestas”