En un nuevo capítulo de controversias, el presidente argentino Javier Milei se encuentra en el centro de la tormenta tras atacar en redes sociales a Ian Moche, un niño de 12 años con autismo de La Plata, conocido por su activismo en favor de la inclusión y la concientización sobre el trastorno del espectro autista (TEA).
La acción del mandatario, que incluyó la publicación de una imagen de Ian junto a la expresidenta Cristina Kirchner, ha generado un repudio generalizado en redes sociales, medios de comunicación y el ámbito político, poniendo en cuestión la sensibilidad del gobierno hacia las personas con discapacidad.
El origen del conflicto: una denuncia valiente
La polémica comenzó cuando Ian Moche, acompañado por su madre, Marlene Spesso, denunció públicamente al titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Diego Spagnuolo, por comentarios insensibles. Según el relato de Ian y su madre, en una reunión en marzo de 2024, Spagnuolo habría dicho: “Si vos tuviste un hijo con discapacidad, es problema de la familia, no del Estado”.
Además, cuestionó los derechos de las personas con discapacidad, como la exención de peajes, preguntando: “¿Por qué yo tengo que pagar peaje y ustedes no?”. Estas declaraciones, que reflejan una postura distante de las necesidades del sector, desataron una fuerte reacción en la comunidad.
Ian, quien desde los 9 años utiliza sus redes sociales (@ianmoche) para visibilizar las realidades de las personas con autismo, se convirtió en un símbolo de resistencia frente a lo que muchos consideran un retroceso en las políticas de discapacidad bajo la gestión de Milei. Su denuncia, amplificada en programas de radio y televisión, puso en evidencia la falta de preparación de Spagnuolo, un abogado cercano al presidente sin experiencia previa en el área de discapacidad.
La respuesta de Milei: un ataque personal
En lugar de abordar las críticas con empatía o buscar soluciones, Milei optó por una estrategia que ha caracterizado su gestión: el ataque directo en redes sociales. El 1 de junio de 2025, el presidente publicó en su cuenta de Instagram una historia con una imagen de Ian Moche junto a Cristina Kirchner, tomada hace un año durante un encuentro entre ambos. La publicación, acompañada de un mensaje que señalaba a Ian como parte de una supuesta “operación” kirchnerista orquestada por el periodista Néstor “Pautino” Rodríguez, desató una avalancha de críticas.
Milei acusó a Ian y a su familia de estar vinculados al kirchnerismo, sugiriendo que su denuncia era parte de una maniobra política para desestabilizar su gobierno. En X, cuentas afines al oficialismo, como @hombregrisxd y @tendenciasxd, replicaron esta narrativa, afirmando que Ian, un menor de edad, estaba siendo “utilizado” por figuras como Cristina Kirchner y Sergio Massa para atacar al gobierno. Estas publicaciones, lejos de calmar las aguas, intensificaron la indignación pública.
Reacciones: repudio generalizado
La reacción en redes sociales fue inmediata. Usuarios de X, como @ceciliaencina y @PonzistaAnti, condenaron la actitud de Milei, destacando la crueldad de atacar a un niño con autismo que lucha por los derechos de las personas con discapacidad. “Es inaceptable que un presidente se ensañe con un menor vulnerable en lugar de responder a sus legítimas demandas”, escribió @ceciliaencina en un posteo que acompañó con un audio de Marlene Spesso relatando la situación en un programa radial.
En el ámbito político, la denuncia de Ian también tuvo eco. La Cámara de Diputados anunció que este miércoles tratará un proyecto para declarar la emergencia en discapacidad hasta 2027, una iniciativa impulsada en parte por la presión social generada por este caso. Organizaciones de derechos humanos y asociaciones de personas con discapacidad expresaron su solidaridad con Ian, exigiendo la renuncia de Spagnuolo y una disculpa pública del presidente.
Marlene Spesso, madre de Ian, lamentó la revictimización de su hijo: “Es doloroso que un funcionario salga a desmentir a un niño en lugar de asumir su responsabilidad y trabajar por las personas con discapacidad”. La madre también destacó la fortaleza de Ian, quien, a pesar de la angustia causada por los ataques, sigue comprometido con su activismo.
Un gobierno bajo la lupa
Este episodio no es un hecho aislado. La gestión de Milei ha sido criticada por su falta de sensibilidad hacia sectores vulnerables, incluyendo recortes en programas de discapacidad y declaraciones que minimizan la responsabilidad del Estado en la protección de derechos fundamentales. La designación de figuras como Spagnuolo, cuya principal credencial parece ser su cercanía con el presidente, refuerza la percepción de un gobierno que prioriza la lealtad política sobre la idoneidad.
Además, la estrategia de Milei de utilizar las redes sociales para atacar a opositores, periodistas y, en este caso, hasta un niño, refleja un estilo de comunicación que muchos consideran agresivo y divisorio. “El insulto es su manera de hacer política”, señaló el economista Roberto Cachanosky, quien recientemente rompió con el presidente tras haberlo apoyado en el pasado.
Ian Moche: un símbolo de lucha
A sus 12 años, Ian Moche se ha convertido en un referente inesperado en la defensa de los derechos de las personas con discapacidad. Su valentía al enfrentar a un funcionario público y su compromiso con la inclusión lo han hecho merecedor de un amplio apoyo en la sociedad argentina. En un contexto de ajuste económico y recortes en políticas sociales, su voz resuena como un recordatorio de la importancia de la empatía y la responsabilidad estatal.
La pregunta que queda en el aire es si el gobierno de Milei tomará este episodio como una oportunidad para reflexionar y rectificar, o si continuará profundizando la grieta con sectores que exigen un país más inclusivo. Por ahora, las redes sociales y los medios de comunicación siguen siendo el escenario de un debate que, lejos de apagarse, promete seguir creciendo.