
En medio del acto protocolar por el Tedeum del 25 de Mayo, el presidente Javier Milei protagonizó un momento llamativo al llegar a la Catedral Metropolitana: evitó saludar al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y a la vicepresidenta Victoria Villarruel, quienes lo esperaban en la entrada junto a otras autoridades.
El gesto fue evidente y quedó registrado en la transmisión oficial. Milei descendió del vehículo presidencial, se acercó con la mirada al frente, no extendió la mano a quienes lo aguardaban en fila y continuó su caminata directo hacia el interior del templo, generando incomodidad visible en los rostros de Macri y Villarruel.
“Roma no paga traidores”
El presidente Javier Milei lanzó este sábado un fuerte mensaje desde sus redes sociales para justificar su negativa a saludar a Jorge Macri durante el Te Deum en la Catedral Metropolitana. Según supo Noticias Argentinas, el mandatario estaba al tanto de que compartiría espacio con el jefe de Gobierno porteño, pero decidió ignorarlo deliberadamente.
“Roma no paga traidores”, escribió Milei en X (ex Twitter), citando un video donde se lo ve esquivando el saludo que intentaba ofrecerle Macri.
Poco después, publicó otro mensaje aún más contundente: “Si se es bueno con los malos (esto es, con quienes traicionan, mienten, calumnian, injurian y ensucian por una mera ventajita), se termina siendo muy malo con los buenos”.
Según se supo el mandatario apuntó directamente contra el asesor catalán que colaboró con Macri en campaña, Antoni Gutiérrez-Rubí, a quien calificó como “chantalán”, y agregó: “Saludos para chantalán Gutiérrez Rubí y otras basuras varias”.