En un encendido análisis tras los recientes comicios en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el presidente del PRO en General Pueyrredon, Emiliano Giri, expresó una autocrítica poco frecuente dentro del espacio y envió un mensaje claro al interior del partido: hay que dejar de mirar hacia afuera y comenzar a hacerse cargo.
Giri destacó que el resultado porteño reflejó un respaldo al gobierno nacional. “Como diría Clinton: ‘es la economía, estúpido’. Felicitaciones a los estrategas”, ironizó, reconociendo que los votantes capitalinos valoraron la situación económica por encima de otros factores. Sin embargo, el dirigente también apuntó al desgaste de su propio espacio tras dos décadas de gestión en la ciudad, lo que, según él, se traduce en un evidente “cansancio” y malestar social que debe interpelar al PRO y no provocar enojos.
La elección, afirmó Giri, expuso “la necesidad de una autocrítica profunda en la estructura nacional del partido”. Cuestionó duramente la estrategia fallida en la Ciudad y pidió “mayor autonomía para los armados bonaerenses”, reclamando dejar de centralizar las decisiones políticas desde CABA.
En una declaración que marca un cambio de tono dentro del PRO, Giri también llamó “a no subestimar a los dirigentes de La Libertad Avanza (LLA), reconociendo el crecimiento de ese espacio y el rol clave de Karina Milei, quien “se anotó un triunfo importante”.
Con dureza, advirtió sobre la fragmentación interna que vive el partido: “En dos años nos convertimos en una picadora de carne de dirigentes y gente bien intencionada”, señaló, remarcando la urgencia de que cada territorio se haga cargo de su propia agenda.
El mensaje cerró con un reconocimiento a los libertarios por su desempeño electoral, y una invitación a toda la dirigencia a trabajar por la consolidación del espíritu de cambio que marcó 2023.