Más de 5.000 personas pasaron por el Parlamento para darle el último adiós a José “Pepe” Mujica

El expresidente José Mujica tuvo el inicio de su despedida  en el Parlamento del Uruguay, cuyo féretro estuvo en el Salón de los Pasos Perdidos, en el marco del funeral de Estado por el que pasaron al menos 5.000 personas y del cual participaron figuras de todo el arco político, incluidos el presidente Yamandú Orsi y los exmandatarios Luis Lacalle PouLuis Lacalle de Herrera Julio María Sanguinetti.

“Desde las 13:30 van pasando más de 5.000 personas. Es un hecho inédito que no tiene antecedentes”, señaló por la noche a Subrayado el secretario de la Comisión Administrativa del Palacio Legislativo, Wilder Leal. Y anticipó que, ante la gran cantidad de gente que sigue esperando, las puertas podrían seguir abiertas hasta pasada la medianoche para despedir al líder, a pedido de la viuda Lucía Topolansky.

El cortejo fúnebre inició a las 10 en la Torre Ejecutiva e hizo tres paradas antes de llegar al Parlamento: pasó primero por el local de MLN-Tupamaros, que gestó y para el cual militó en la década del ’70; luego por la Huella de Seregni, sede del Frente Amplio (FA), por el cual escaló hasta la Presidencia; y finalmente por el local del MPP, el partido del cual era el máximo referente.

Apenas pasadas las 13, el cortejo con el féretro de Mujica, quien falleció el martes a sus 89 años, arribó al Palacio Legislativo. En una primera etapa, el salón se mantuvo abierto solo para unas 300 personas, en un momento de mayor “intimidad” entre los allegados del expresidente.

Mientras que desde las 14 —una hora antes de lo previsto— comenzó la instancia pública y se abrieron las puertas para la ciudadanía y todas las personas que quieran acercarse a despedirse del histórico político, que podrán hacerlo hasta las 22, cuando se cerrará el recinto hasta las 10 de este jueves, según informaron desde el Parlamento.

Mañana continuará la ceremonia y se espera la visita de líderes internacionales como los presidentes Lula da Silva (Brasil); Gabriel Boric (Chile) y Luis Arce (Bolivia).

Uno de los primeros dirigentes locales en presentarse a dar sus respetos al exmandatario fue Lacalle Pou, que se acercó a saludar a la viuda de Mujica, Lucía Topolansky, y al actual jefe de Estado, quien destacó la “sencillez humana” del referente del MPP.,También estuvieron presentes miembros del gabinete, incluido el secretario de Presidencia, Alejandro Sánchez, quien anunció la compra de 4.000 hectáreas por parte de Colonización.

Además, por la oposición lo hicieron los senadores Álvaro Delgado Javier García y el diputado Rodrigo Goñi, ambos del Partido Nacional (PN), mientras que Lacalle Pou emitió declaraciones donde eligió las “actitudes políticas buenas para el país” de su adversario político.

Por el Partido Colorado (PC), además de Sanguinetti, hicieron lo propio los senadores Andrés Ojeda y Pedro Bordaberry.

Poco después llegaron al salón de Pasos Perdidos el exmandatario, Luis Lacalle Herrera, y el exministro y senador, Luis Alberto Heber. Entrada la tarde, desde Argentina se acercó a presentar sus respetos el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien resaltó que “Mujica deja una huella en todos los que lo admiramos, lo respetamos, lo conocimos y lo seguimos, pero es mucho más amplio”.

Se espera que se hagan presente personalidades de todo el arco político además de miles de personas militantes y no militantes. Asimismo, el velatorio continuará el jueves, día en el que se espera la llegada del presidente de Brasil, Lula da Silva, desde China; así como la presencia de otros mandatarios como Gustavo Petro (Colombia), Gabriel Boric (Chile) y Luis Arce (Bolivia).

Duelo nacional por la muerte de José Mujica

Como parte de los respetos al expresidente, el gobierno decretó duelo nacional por tres días, el 14, 15 y 16 de mayo, con banderas a media asta en todas las reparticiones del Estado, tanto en Uruguay como en el exterior, y honras fúnebres.

Mujica falleció a días de cumplir los 90 años como como consecuencia de un deterioro en su salud producto del cáncer de esófago que le fue diagnosticado en abril del año pasado y que, pese al tratamiento al que se sometió, se extendió luego al hígado y la enfermedad entró en fase terminal.

A pesar de su padecimiento, el expresidente continuó mostrándose en público y apuntaló la campaña que llevó a Yamandú Orsi a la Presidencia, yendo a votar en cada una de las instancias electorales hasta noviembre.

Precisamente, su ausencia en la votación de las departamentales del domingo pasado fue una muestra del agravamiento en su estado de salud, sobre el cual su esposa, la exvicepresidenta Lucía Topolansky, había definido como “en la meseta”.