
A cuatro días del inicio de Semana Santa, los principales destinos turísticos de la provincia de Buenos Aires encaran el último tramo de la previa con reservas hoteleras por debajo del promedio histórico y con expectativas moderadas. En Mar del Plata, la ciudad emblema del turismo bonaerense, la ocupación ronda el 50%, mientras que en Necochea, Pinamar y otras localidades costeras predomina la cautela.
“Por ahora está todo muy tibio, hay pocas consultas y reservas”, reconoció a medios locales la presidenta de la Asociación de Hoteles de Necochea, Claudia Calvo, en línea con lo que ocurre en otros puntos del corredor de la Costa Atlántica de cara al próximo fin de semana largo.
Según apuntan desde el sector hotelero, la mayoría de las reservas se concentran en establecimientos de tres a cinco estrellas, con estadías promedio de entre dos y tres noches. Como estrategia para atraer turistas, muchos hoteles retrotrajeron precios a diciembre y sumaron promociones con comodidades bajo techo como pileta climatizada o spa.
En Mar del Plata, las reservas alcanzan apenas la mitad de la capacidad hotelera, una cifra baja para una de las fechas más fuertes del año. “Está más tranquilo que en años anteriores y no hay tantas consultas. El teléfono suena poco”, graficaron desde la Asociación Hotelera local.

El impacto negativo del último fin de semana largo del 24 de marzo, donde la ocupación no llegó al 40%, todavía se siente y en el sector gastronómico, el éxito dependerá del clima y de cómo repercutan en el bolsillo las medidas económicas anunciadas por el Gobierno.
“La expectativa está, pero dependemos de que no llueva y de que los argentinos puedan darse el gusto de viajar”, resumieron desde el sector.
Tandil, la excepción con buenos niveles de reservas para Semana Santa
En el extremo opuesto, Tandil se perfila como uno de los destinos mejor posicionados para Semana Santa, con una propuesta turística que combina tradición religiosa, naturaleza y gastronomía, la ciudad serrana ya registra una ocupación hotelera cercana al límite.
“Hasta el viernes veníamos bien con reservas y confiamos en que se va a terminar llenando la ciudad”, sostuvo el titular de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Bares y Afines de Tandil, Nicolás Funaro. Aunque todavía quedan plazas disponibles, varios establecimientos ya colgaron el cartel de “completo”.
El “efecto propietario” en la costa bonaerense
En Pinamar, el nivel de consultas es bajo, aunque los empresarios del sector esperan que se registre un fuerte movimiento impulsado por los propietarios que suelen ocupar sus viviendas durante los fines de semana largos. En Cariló, se calcula que entre el 80% y el 90% de las casas estarán ocupadas. Además, la ciudad será sede del tradicional torneo de golf Pino de Oro, que ya cuenta con casi 150 inscriptos de distintos puntos del país.
En Dolores, el Resort Spa Termal informó que ya alcanzó el 75% de ocupación para Semana Santa. “Las aguas cálidas, en espacios cubiertos, son una garantía frente al clima incierto”, destacó su responsable, Aldo Karagozian.
Una cartelera para levantar los números del turismo bonaerense
Mar del Plata se juega una fuerte apuesta con su programación cultural y musical. A la cartelera teatral del verano se le suman espectáculos como “Brujas”, “El Equilibrista”, “Sex-La obra” y propuestas humorísticas como “Sean de Termos y Mabeles”. En el plano musical, se destacan recitales de Miranda, No Te Va Gustar, Ismael Serrano y Skay y Los Fakires.
Desde la Cámara Gastronómica local reconocieron que “el nivel de reservas es del 50%, pero esperamos que ese número crezca”. A su vez, señalaron que “hubo más movimiento que hace un mes”, lo que permite vislumbrar un posible repunte de último momento.
En paralelo, el interés de los turistas se evidencia en los datos de la plataforma Airbnb, que posiciona a Mar del Plata como uno de los cinco destinos más buscados para esta Semana Santa, junto a Buenos Aires, San Carlos de Bariloche, San Martín de los Andes y Puerto Iguazú.