
Los ADR argentinos perdieron hasta 7% en Wall Street. El S&P Merval de la Bolsa porteña retrocedió 3,9%y los bonos en dólares, un 3,7%. El dólar libre subió a $1.345 y los financieros superaron los $1.360. El BCRA vendió USD 35 millones en el mercado y las reservas quedaron debajo de USD 25.000 millones después de 14 meses.
La debacle de la cotización de activos financieros globales, que se extendió por tercera rueda consecutiva ante la alta tensión por las tarifas comerciales, golpeó a las variables de la Argentina en todos los frentes. Además de amplias caídas en las valuaciones de acciones y bonos, los dólares alternativos subieron a nuevos máximos desde julio y las reservas del BCRA perdieron más de USD 300 millones por efecto de la depreciación del yuan chino y del oro.
En medio de un confuso panorama inversor por la guerra de aranceles cruzados, los ADR argentinos que cotizan en Wall Street experimentaron intensas fluctuaciones. Tras una apertura negativa con caídas que llegaron a superar el 8%, los títulos argentinos operados en dólares en Nueva York cedieron hasta 6,8%, encabezadas por Corporación América, escoltada por Grupo Galicia (-6,7%), Banco Francés (-6,5%) y Ternium (-6,5%).
Al mediodía los papeles argentinos se recuperaron brevemente, impulsados por rumores de una posible suspensión de los aranceles impuestos por Estados Unidos. No obstante, la desmentida de la Casa Blanca sobre dicha medida provocó que los activos argentinos volvieran al terreno negativo hasta el cierre de las operaciones.

El índice S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires retrocedió 3,9% a 2.025.967 puntos, un mínimo desde el 12 de noviembre.
Los bonos Globales y Bonares de Argentina promediaban una rotunda caída de 3,7%, mientras que el riesgo país de JP Morgan, que mide la brecha de tasas de los bonos del Tesoro de EEUU con sus pares emergentes, subió 42 unidades para la Argentina, en los 960 puntos básicos.
Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, explicó que “los bonos argentinos en dólares vienen cayendo más que comparables de otros países dado que la situación global actual de volatilidad por aumento de tarifas comerciales de EEUU se suma a la dinámica adversa que muestran los activos argentinos desde los picos de valuación de enero 2025. Esto se debe a que hay, incluso en la previa a desatarse el conflicto global por aranceles, dudas del mercado respecto a qué implicará en materia de esquema cambiario y acumulación de reservas el nuevo acuerdo de Argentina con el FMI por USD 20.000 millones”.
“La clave pasará por ver qué tanto termina afectando a los flujos de exportación de Argentina la tensión comercial global ya que podría implicar menores flujos, dificultando la acumulación de reservas genuinas, ya sea por efecto de menores precios o por efecto de menores cantidades de darse una recesión global. Luego de eso, habrá que evaluar la letra chica del acuerdo con el FMI y sus implicancias respecto tanto a metas cuantitativas como a esquema cambiario a adoptar, que es lo que en definitiva podría permitir a Argentina reducir riesgo país y poder volver a los mercados internacionales de deuda. En ese sentido, la escalada en la tensión global no ayuda, ya que, por lo dicho previamente, el contexto puede implicar que ahora Argentina deba hacer mayores esfuerzos de política doméstica para bajar la prima de riesgo en un contexto internacional más volátil”, apuntó Franco.
Los analistas de Portfolio Personal Inversiones indicaron que “desde la perspectiva de la teoría del comercio internacional, los aranceles generan una pérdida de bienestar global, producto de las distorsiones en precios relativos y de una asignación ineficiente de recursos. Aun así, hay una excepción que podría estar en la cabeza de Trump: si el país que impone los aranceles es lo suficientemente grande, puede mejorar su relación de intercambio. Al reducir su demanda de bienes importados, fuerza una baja en su precio internacional y, en algunos casos, puede terminar ganando más de lo que pierde. Pero es una jugada de equilibrio inestable, especialmente si del otro lado también hay cierto poder de negociación”..
Eduardo Levy Yeyati, Chief Economic Advisor de Adcap Grupo Financiero, consideró que “Trump lanza su ‘muro de aranceles” y los mercados se derriten. Wall Street entra en caída libre, China responde fuerte y Europa busca su propio escudo. Ya se sienten los costos políticos en los EEUU, pero Trump está aún lejos de recular. El comercio global se redibuja mientras se encienden las alarmas de recesión y repunte inflacionario. En América Latina, el 10% tiene doble filo: un golpe en la línea de flotación de una región con costo financiero creciente, y un beneficio relativo transitorio. La guerra ya no es comercial: es financiera, estratégica y global”.
Jorge Fedio, analista técnico de Clave Bursátil, aportó: “Temíamos encontrarnos con este cuadro de situación mucho antes por la ya exageradísima e impagable montaña de deuda de EEUU que ahora necesariamente deben ‘rollear’ a tasas altas y, quizás sea la estratégica razón, de semejante decisión. Técnicamente, esto luce a un verdadero desastre”.
“Coincidimos, a nuestro entender, con este fenomenal berrinche de Donald Trump, Wall Street poco a poco perderá el protagonismo que hasta ahora ejercía en el mundo de los mercados y de las inversiones e irá girando hacia otro polo de atracción, perderá protagonismo que hasta ahora ostentaba Wall Street. Dicho de otra manera, se les termina el ciclo de suba desde los mínimos de la “crisis subprime” a los ya alcanzados récords históricos de Dow Jones, S&P 500 y Nasdaq”, añadió Fedio.
Subió el dólar y bajaron las reservas
El dólar libre ganó 35 pesos o 2,7% este lunes, para terminar a $1.345 para la venta, el precio más elevado desde el 26 de agosto del año pasado. En lo que va de 2025, la divisa informal progresa 115 pesos o un 9,3%, por encima de la inflación del período. Con un dólar mayorista que finalizó sin variantes, a $1.076, la brecha cambiaria se amplió a 25%, la más grande desde el 22 de octubre del año pasado (26%).
“El dólar mayorista no comenzaba una primera rueda semanal sin cambios desde el 17 de marzo pasado”, comentó Gustavo Quintana, operador de PR Corredores de Cambio.
Las paridades financieras del dólar, implícitas en los precios de acciones y bonos que son cotizados en simultáneo en la Bolsa local y los mercados del exterior, operan con un incremento de unos 30 pesos o un 2,3%. El dólar MEP mediante bonos cerró en los $1.361,90, mientras que el “contado con liqui” llegó a 1.362,35 pesos. Se trata de las cotizaciones más elevadas desde el 12 de julio del año pasado.
El monto operado en el segmento de contado del mercado mayorista creció unos USD 65 millones respecto del viernes, a USD 394,5 millones, aunque el Banco Central volvió a vender divisas, en esta ocasión por USD 35 millones, para compensar la oferta.
En abril, el BCRA pasó a un saldo negativo por su participación cambiaria de 35 millones de dólares
El impacto de la devaluación del yuan chino respecto del dólar este lunes (-0,4%) y del oro (-1,5%) se notó en la caída de las reservas brutas, por unos USD 328 millones (-1,3%), a USD 24.791 millones, el stock más bajo desde el 23 de enero de 2024.
Fuentes del BCRA señalaron a Infobae que “casi USD 180 millones de la caída se deben a baja de cotizaciones: monedas y oro. Además, hubo pagos” de deuda soberana.
Rueda a volátil en Wall Street
El escenario internacional siguió tenso. A nivel global, los mercados bursátiles reflejaron el temor a una recesión mundial, exacerbado por la política arancelaria de Trump. Al cierre, el tecnológico Nasdaq, que llegó a desplomarse 4%, ganó un marginal 0,1%, mientras que el índice Dow Jones de Industriales restó 1,9 por ciento. Los inversores acusaron el impacto de los aranceles y las posibles represalias de China y otros socios comerciales, lo que provocó un sentimiento de aversión al riesgo.
Mientras tanto, en Asia, los mercados continuaron con fuertes caídas, afectados por el conflicto comercial entre Estados Unidos y China. El Nikkei 225 de Tokio registró una caída del 7,8%, mientras que el Hang Seng de Hong Kong se desplomó un 13,2% y en China, el Shanghái Composite perdió más del 7 por ciento.
El EuroStoxx 50, que reúne a las principales empresas europeas cotizantes, cerró la jornada con grandes descensos del 4,6%, hasta los 4.653,35 puntos.
El precio del petróleo perdió un 1,6%, a USD 60,98 el barril de crudo ligero de Texas, cerca de mínimos en cuatro años, en un marco de mercados de materias primas en declive al aumentar las probabilidades de una recesión.