El Gobierno busca fondos en el BID y el Banco Mundial, mientras cierra el acuerdo con el Fondo Monetario

En paralelo a las negociaciones que mantiene desde el inicio de la gestión con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno nacional de Javier Milei comenzó a acelerar las gestiones con otros organismos multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial para obtener fondos adicionales que permitan reforzar las reservas del Banco Central y garantizar el cumplimiento de los compromisos financieros.

En este marco, el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, viajará a Chile para participar de la asamblea anual del BID, donde se espera que mantenga reuniones clave con el titular del organismo, Ilan Goldfajn, mientras que el Presidente y el ministro de Economía, Luis Caputo, recibirán el próximo 2 de abril en Buenos Aires al presidente del Banco MundialAjay Banga.

En tanto, el objetivo del equipo económico de Milei es fortalecer el respaldo financiero en medio de las conversaciones con el FMI. Es que, Argentina enfrenta un cronograma de vencimientos exigente en los próximos años, con pagos de US$14.000 millones al organismo internacional y otros US$12.600 millones a los bancos multilaterales, incluyendo el BID y el Banco Mundial.

En este escenario, el Gobierno nacional busca ampliar las líneas de crédito disponibles y asegurar nuevos desembolsos que contribuyan a mejorar la estabilidad macroeconómica del país, con el objetivo de mantener los niveles inflacionarios por debajo del 3%, e incluso lograr números más bajos en los próximos meses.

La directora gerente de Operaciones del Banco Mundial, Anna Bjerde; el ministro de Economía, Luis Caputo; el presidente del BID, Ilan Goldfajn; y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno.

Por caso, el BID ya tiene compromisos pendientes con Argentina y ya anunció nuevos desembolsos para los próximos meses. En diciembre de 2024, Goldfajn informó que el organismo ampliará su financiamiento en US$2400 millones entre 2024 y 2025. Además, recientemente el BID aprobó un crédito de US$200 millones para asistir a Bahía Blanca tras las inundaciones que afectaron a la ciudad.

Por su parte, Quirno, que representa al equipo de Caputo en las negociaciones internacionales, podría aprovechar su visita a Chile para mantener un encuentro con Goldfajn y avanzar en la planificación de los desembolsos. En febrero de 2024, ambos funcionarios se reunieron en la cumbre del G20 en Sudáfrica, donde el BID ratificó su respaldo financiero a Argentina de cara al 2025.

En este contexto, desde el Gobierno nacional consideran que el apoyo del BID es clave en la estrategia para mejorar la disponibilidad de dólares en el país. Además del crédito para Bahía Blanca, el organismo tiene en carpeta otros programas de financiamiento que podrían contribuir a la reactivación de sectores estratégicos.

En tanto, el Banco Mundial también juega un papel fundamental en la estrategia de financiamiento del Gobierno de Milei. Es que, la entidad mantiene actualmente una cartera activa de 26 préstamos en Argentina y, al igual que el BID, anunció la extensión de sus líneas de crédito a fines de 2024.

El Gobierno mantendrá nuevas conversaciones con el BID y el Banco Mundial en busca de nuevas financiaciones.

El próximo 2 de abril, el presidente del Banco Mundial visitará Buenos Aires para reunirse con Milei Caputo, y uno de los principales temas de discusión será la asignación de nuevos fondos, que este año estarán enfocados en subsidiar tarifas de electricidad y el transporte público. Estos recursos buscan evitar un impacto brusco en el costo de vida de la población en medio de las medidas de ajuste fiscal implementadas por el Gobierno.

Desde el Ministerio de Economía consideran que la continuidad de los préstamos del Banco Mundial es “crucial para garantizar la estabilidad del programa económico” y evitar un mayor deterioro social. Aunque el Gobierno manifestó su intención de reducir los subsidios a largo plazo, en el corto plazo necesita asegurar financiamiento para sostenerlos mientras avanza con su plan de estabilización.

Acuerdo con el FMI: los detalles y desafíos pendientes

En paralelo a las negociaciones con el BID y el Banco Mundial, el Gobierno continúa el diálogo para lograr un nuevo acuerdo con el FMI. Este martes, el directorio ejecutivo del organismo confirmó que las conversaciones están avanzadas y que se realizan consultas internas sobre el nuevo programa.

Si bien aún no se oficializó el monto del acuerdo, se estima que la cifra rondará los US$15.000 millones de Derechos Especiales de Giro (DEG), equivalentes a aproximadamente US$20.000 millones. Sin embargo, esta cifra podría ajustarse tras la discusión con el directorio del FMI.

Uno de los aspectos clave del nuevo acuerdo es su estructura de pagos, que se prevé que tenga una tasa de interés inferior al 6% y un plazo de 10 años y medio, con un período de gracia en el que Argentina solo abonará intereses durante los primeros cuatro años. Recién en 2029 comenzaría a pagar el capital adeudado, lo que le daría al Gobierno de Milei margen para ordenar la economía antes de afrontar los vencimientos más grandes.

A pesar de los avances en las negociaciones, persisten algunas incertidumbres: uno de los puntos en discusión es qué porcentaje del monto total del acuerdo será destinado a refinanciar el actual cronograma de vencimientos con el FMI y cuánto quedará realmente disponible como financiamiento neto para reforzar las reservas.

Por el momento, el Gobierno de Milei apuesta a cerrar un nuevo acuerdo con el FMI y, al mismo tiempo, garantizar el respaldo de otros organismos multilaterales como el BID y el Banco Mundial. La estrategia busca fortalecer las reservas, asegurar el cumplimiento de los compromisos financieros y evitar una crisis de liquidez en los próximos años.