
La bronca y desesperación de los abuelos de Mar del Plata estalló en las calles en una protesta que reflejó la crudeza de la situación que viven a diario. Con ingresos cada vez más bajos, la imposibilidad de acceder a medicamentos esenciales y una salud que se vuelve inalcanzable, cientos de jubilados y pensionados salieron a reclamar. No solo luchan por llegar a fin de mes, sino que también muchos dependen de la ayuda de sus familias para poder sobrevivir, enfrentándose a la angustia constante de no saber si podrán cubrir sus necesidades más básicas.
La movilización, convocada por la “Multisectorial de Jubilados y Pensionados”, marchó desde la sede del PAMI en Independencia y Luro hasta el Monumento al General San Martín. A lo largo del recorrido, se sumaron distintas organizaciones sociales, sindicatos, y hasta hinchas del Club Alvarado, quienes, con trompetas y tambores, marcaron el ritmo de una marcha cargada de impotencia y sufrimiento.
“Somos el sector más castigado por el brutal ajuste de Javier Milei”, expresaron durante la manifestación. Los jubilados, quienes fueron los primeros en salir a la calle a raíz del ajuste, señalaron que se sienten completamente abandonados por un gobierno que no solo les recorta los ingresos, sino que además les niega el acceso a servicios de salud básicos.
“Nos alcanzamos a comprar los medicamentos, no llegamos ni a mitad de mes y, cuando lo logramos, es gracias al apoyo de nuestras familias”, dijo una de las manifestantes, visiblemente angustiada. Es que para muchos, la situación es tan grave que dependen de sus hijos, nietos o sobrinos para no morir en el intento. La falta de recursos para medicamentos y el alto costo de la vida están llevando a los jubilados a una situación límite.
El grito de “No somos descartables” resonó a lo largo de la movilización. Los abuelos de Mar del Plata no están dispuestos a ceder ante la política de ajuste implementada por el gobierno nacional, y su resistencia se fortalece con el apoyo de sindicatos, agrupaciones políticas y organizaciones sociales. En el comunicado de la Multisectorial, los jubilados dejaron en claro que “la lucha continúa” y que la unidad con otros sectores que sufren los embates de la crisis es esencial para enfrentar este ajuste que los está empujando a la desesperación.
“Lo que buscamos no es solo sobrevivir, sino ser tratados con dignidad”, expresó otro manifestante. Para muchos, los abuelos sienten que están siendo vistos como una carga por el gobierno, pero ellos aseguran que son los protagonistas de una lucha fundamental para el futuro del país.
El reclamo va más allá de la mejora de los ingresos: se trata de justicia social, de condiciones mínimas para vivir con dignidad. La marcha en Mar del Plata no solo fue un grito de resistencia, sino también un llamado a la unidad de todos los sectores que enfrentan la misma política de ajuste. Los jubilados no están dispuestos a seguir siendo invisibilizados y, por ello, seguirán luchando, ya que saben que el enemigo es común: la política de hambre y miseria a la que los está empujando el gobierno de Javier Milei.