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“La temporada fue un desastre. Al punto que ni sueldos se pudieron pagar porque económicamente fue muy mala”, manifestó el empresario gastronómico y dueño de Mirador del Cabo, ubicado en la zona de Cabo Corrientes, Goyo Magiar, en diálogo con “el Retrato…”. Asimismo, analizó: “La gastronomía está en crisis total. El ajuste es consecuencia de un derroche total que hubo en los años anteriores y de alguna manera se tiene que corregir. Espero sea para mejor”.
En este contexto, Magiar precisó: “En temporadas anteriores vendía 700-800 cubiertos en un día de trabajo importante. Hoy no nos acercamos ni al 10%. Por eso, decidimos cerrar de noche. Y ni hablar del costo del agua, de la luz, del gas. Tenemos un gasto diario de 600.000 pesos, y no se factura 1.000.000 diarios”. Además, “Existe una conciencia generalizada de la gente de lo que está pasando. Es un ajuste para ver si es posible arrancar un proyecto serio. La mayoría lo acepta, lo entiende. Era necesario” y subrayó: “Estoy de acuerdo con las políticas que se están implementando y creo que van a servir. Lo que estamos pasando es consecuencia de todo lo anterior”.
Siguiendo esa línea, agregó: “El turismo que vino esta temporada hace filas en los lugares gastronómicos económicos, de comida al paso. A eso se le suma la competencia. Quienes pueden salir a comer, ya tienen determinados lugares. No es como en años pasados. Por eso, se trata de tener la esperanza de que esto va a mejorar la temporada que viene, y que vamos a tener turismo más importante”.
“No aprendieron a trabajar”
Respecto a las problemáticas que enfrenta el sector gastronómico, Magiar agregó: “Falta personal profesional. Hay mucha gente desocupada, durmiendo en la vereda, que vivía del aire, de lo que le regalaban a cambio de votos y tener una vida cómoda sin hacer nada. Y ahora nos encontramos con poca mano de obra calificada, pero hay millones de cuidacoches. Es gente que no tiene herramientas de trabajo, no es calificada en ninguna tarea”.
De esta manera, en cuanto a la temporada invernal, anticipó: “Cada comerciante necesitará apoyo para pasar el invierno. Amigos y familia. Un banco es una prestataria de servicios que ayudar si sabe que vas a cumplir. Algo así hay que hacer, porque sino va a ser un desbande de cierre de negocios terrible. Sobre todo, por los cánones municipales”.
“La inseguridad está latente en toda la ciudad”
Consultado por la creciente ola de hechos delictivos, Magiar reflexionó: “Mar del Plata es una de las ciudades que más sufre la inseguridad. Es un desastre. Antes, la gente venía a trabajar. Tenía esa cultura, y ahora es diferente. No discrimino, pero es gente que no sabe qué hacer. Si vas a tu casa, tu familia no tiene para comer y no sabes cómo alimentarlos, salís a la calle con la cabeza media rara. Eso es lo que está pasando, independientemente de que el delincuente es delincuente. Hay mucha gente suelta a la que hay que generarle trabajo”.
“Hay que descentralizar esta provincia. Hay mucha gente, poco trabajo y el turismo que tenemos es un turismo popular que come pizza y Mar del Plata no va a ningún lado así”, expresó y recalcó: “Esto no lo vi nunca. Es preocupante. La gastronomía es un desastre total, pero obedece a este plan de ajuste que no considero malo. Sólo espero que venga agarrado de soluciones: nada más ni nada menos que trabajo. Conseguir trabajo para que la gente pueda salir y eso todavía no se está dando”.