Cristina Fernández de Kirchner hizo otra recorrida al conurbano. Fue de forma intempestiva y sin aviso previo. Es una modalidad que volvió habitual desde que asumió la presidencia del Partido Justicialista (PJ), pero hoy hubo algo particular: a la misma hora que se sumergía en el partido de Moreno, a una actividad política junto a la intendenta Mariel Fernández, la Cámara Federal de Casación Penal leía la sentencia sobre la Causa Vialidad.
“Como no se bancan que una mujer tenga razón y no me pueden dar una piña, hacen las cosas que hicieron hoy en Comodoro Py”, señaló la ex presidenta en el acto que encabezó en el distrito de la Primera Sección electoral.
“Al lado de lo que han que tenido que aguantar miles de mujeres en situaciones horrendas, esto no lo veo como un sacrificio sino como una obligación de alguien que tiene un proyecto de país”, insistió CFK en otro tramo de la actividad en Moreno.
Minutos antes, el tribunal había ratificado la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos que ya había dictado en primera instancia el Tribunal Oral en diciembre de 2022. La señal de CFK con su raid proselitista fue inequívoca: mantener su perfil político alto y confrontar contra el Poder Judicial.
Cuando los primeros vestigios de Sol alumbraban los edificios de Recoleta, un grupo de militantes se agolpaba afuera del departamento de CFK, en la esquina de Juncal y Uruguay. Tuvieron que esperar hasta minutos antes de las 11, la hora prevista para que Casación leyera la sentencia del fallo. Recién en ese momento, la ex presidenta salió de su casa, saludó a sus seguidores y se subió a un auto.
Hubo confusión. Una guardia periodística esperaba a Cristina afuera del Instituto Patria, en Rodríguez Peña 80 de la Ciudad. Se creía que venía desde su departamento en Recoleta directo a su unidad básica. Pero volvió a sorprender, con cierto tono desafiante. De pronto, difundió un breve video en redes sociales anunciando que iba a Moreno a compartir una actividad junto a la intendenta local y a 400 mujeres. La movida estaba preparada, pero no había sido comunicada.