En las últimas horas, el PRO de Mauricio Macri salió en sus redes sociales para marcar la postura del partido político sobre las relaciones internacionales de Argentina y volvió a diferenciarse de las decisiones que toma el Gobierno nacional de Javier Milei, luego del cambio de postura del Ejecutivo en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) y su giro en lo vincular con China.
“La integración inteligente al mundo es una prioridad estratégica por la que siempre trabaja el PRO. Nos pensamos (como país y como partido) integrados al mundo, poniendo a las relaciones internacionales al servicio de todos los argentinos”, sostuvieron desde el espacio amarillo luego de que se trasmitiera la entrevista de Javier Milei con Susana Giménez, en la que el jefe de Estado reconoció que le interesa profundizar la relación entre Argentina y China y defendió sus críticas hacia la ONU.
Vale precisar que, la semana pasada el jefe de Estado estuvo en la Asamblea General de la ONU, en el que despotricó contra la agenda 2045 y desde la cancillería de Diana Mondino, informaron que Argentina no participaría del Pacto del Futuro que pretendían establecer los países que integran la organización.
“Vemos al mundo más como oportunidad que como amenaza. Los problemas como la erosión de la democracia y las libertades individuales, las violaciones a los Derechos humanos (DDHH), el hambre, la pobreza, el cambio climático, el terrorismo y las nuevas amenazas a nuestra seguridad, requieren respuestas coordinadas a través del diálogo regional y global”, definió el PRO.
En este contexto, el documento del PRO reconoció que el partido amarillo considera que la ONU “tiene carencias y fallas a resolver”, pero destacó que es una posibilidad de dialogo de coordinación y discernimiento “en un marco de respeto”, por lo que es una oportunidad para que Argentina “alce su voz en el mundo” y que pueda trasmitir los “valores, aporte a los desafíos globales e intereses soberanos”.
Por caso, el PRO estableció que en la ONU, Argentina, puede plantear el reclamo sobre la soberanía sobre las Malvinas, puede pedir “justicia por los atentados terroristas a la AMIA y a la Embajada de Israel”, y sobre los aportes que puede hacer el país en seguridad alimentaria y energética.
“El mundo se propuso un nuevo horizonte hacia 2045. El desafío ahora es pasar de la palabra a la acción, de los enunciados altruistas a los pasos concretos que impacten positivamente en la calidad de vida de las personas. Una política exterior inteligente es aquella que permite tender y mantener puentes con socios relevantes en un marco de respeto a las diferencias, evitando confrontaciones ideológicas que dañen oportunidades de inversión y comercio que tanto necesita la Argentina para crecer”, definieron desde el PRO.
En concreto, el comunicado del PRO se dio a conocer en medio del giro que emprendió el Gobierno respecto a las relaciones con China, que podría traer tensar el vínculo con Estados Unidos (EEUU) y luego de las críticas que hizo Milei en la Asamblea General, el pasado miércoles que se realizó en Nueva Yorc, y viaje en el que el jefe de Estado decidió no visitar a Donald Trump en la antesala a las elecciones estadounidenses.
Antes del documento del PRO, Milei ratificó su postura
En la entrevista que se dio a conocer el domingo por la noche con Susana Giménez, Javier Milei ratificó su postura en la Asamblea General y dio a conocer su “sorpresa” con China, al tiempo que defendió su alineamiento internacional con Estados Unidos, entre otras definiciones.
En este sentido, Milei aseguró que la “ONU se separó de sus principios iniciales y lo que quiere construir es un Gobierno supranacional” y aseguró que su discurso “fue muy bueno”, pese a que “obviamente incomodó a toda la progresía mundial”.
Por otra parte, el jefe de Estado le interesa profundizar la relación de Argentina con China dado que “ellos no exigen nada, solo piden que no los molesten”, defendió su alineamiento internacional con Estados Unidos, “independientemente de si gobiernan republicanos o demócratas”, e Israel, que “es la única democracia de Medio Oriente”.