El consumo en supermercados volvió a caer y tuvo su peor registro en 5 años

Un informe de la Universidad Nacional de Avellaneda  (UNDAV) reveló que el consumo en supermercados minoristas y mayoristas volvió a decrecer en junio y acumula una caída sostenida de 14,6% en los primeros meses del año, en relación al 2023. “En junio de 2024, los supermercados tuvieron las ventas más bajas de los últimos años”, enfatizó.

Según el informe, las ventas minoristas cayeron 11,6% interanual durante el primer semestre del 2024 y sufrieron un desplome aún mayor que el de la pandemia. En tanto, en supermercados mayoristas, la caída fue del 12,6% en los primeros seis meses del año frente al mismo período de 2023 y representa el peor registro de los últimos 5 años.

Asimismo, la caída del ingreso se refleja en la modificación de los medios de pago por parte de las personas. En el último año, aumentaron de manera significativa los pagos a través de las tarjetas de crédito, que pasaron de representar el 36,5% del total de los medios de pago en 2023 al 43,7% en 2024. En contrapartida, hubo una fuerte disminución en las compras a través de dinero disponible, ya sea con débito o efectivo.

La consultora Scentia, especializada en analizar el consumo masivo,  ya habia arrojado algunos resultados desalentadores en torno al consumo dentro del rubro: en junio, las ventas tanto en grandes cadenas y autoservicios de barrio cayeron un 12,4% interanual; en julio, la baja se aceleró al 16,1% en comercios barriales, y un 16,6% si se analiza particularmente la venta en supermercados. Sin embargo, la semana del 12 al 18 de agosto alcanzó un derrumbe récord del 27,6% interanual.

En paralelo, otras mediciones dan cuenta que el consumo aún no encontró su piso y que la tendencia sigue a la baja. El Índice Banco Provincia de Consumo (IBP Consumo), releva el gasto promedio de los clientes mediante sus tarjetas de crédito y débito y la billetera digital Cuenta DNI, y lo deflacta por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC.

Los datos registrados por la entidad bancaria bonaerense arrojan que en el mes mayo el retroceso interanual se había desacelerado al 15,7%, pero desde entonces sufrió dos meses de desplome consecutivos: cayendo un 20,8% con respecto a junio 2023 y, según informaron la semana pasada, un 23,4% en julio.

Supermercados: las razones detrás de la caída del consumo

Un informe de la Gerencia de Estudios Económicos del Banco Provincia señaló que la tímida recuperación de 6,6% de salario real del sector registrado medida por el INDEC entre marzo y junio deja el acumulado de los primeros siete meses de la gestión de Javier Milei todavía un 9,2% abajo de noviembre de 2023 lo que termina “neutralizando el impacto de la recuperación del salario real sobre el consumo”.

Por otro lado, el informe refleja cómo las fuertes subas de tarifas (luz, gas, agua, transporte) y otros servicios como Internet y telefonía trastocaron el consumo real de los hogares y dejaron una menor capacidad adquisitiva para afrontar las compras de bienes tanto de la canasta básica como durables.

En ese sentido, el Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la UBA y el CONICET estimó que en agosto la canasta de servicios públicos (luz, gas, agua y transporte) para un hogar promedio del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) alcanzó en agosto los $144.433 mensuales, sin subsidios. Este valor representa casi el doble que en marzo ($76.484) y un 380% más que en diciembre ($30.105).

El fuerte deterioro económico se evidencia en dos alimentos básicos de la canasta básica de los argentinos: por un lado, el consumo de carne cayó un 14,1% interanual en los primeros meses del 2024 y es el más bajo desde 1998; por otra parte, el rubro lácteos decreció un 17,3% interanual en el primer semestre del año y se estima que el año cerrará con el nivel más bajo de la historia.

En este contexto, Diarco y otras cadenas mayoristas comenzaron a promover las compras en dólares (incluso con billetes cara chica o deteriorados) a una cotización superior incluso a la del mercado informal para atraer a sus locales a las familias de sectores medios que se ven forzadas al cambio para llegar a fin de mes. Por otro lado, la cadena de origen neerlandes, Makro se va del país y puso en venta las 24 sucursales que tiene en Argentina.