La iniciativa de concesionar, para una fábrica de gin, el espacio del Faro donde existió un Centro Clandestino de Detención durante la dictadura militar sigue provocando rechazo desde distintos sectores, ya que califican esa potencial entrega como “ una falta de sensibilidad y consideración que atenta contra los principios fundamentales de derechos humanos y contra el deber de preservar la memoria colectiva”.
En este marco, este martes desde las 14 en el Sitio de Memoria del Faro han convocado a repintar pañuelos, flor de abuelas y lápices en defensa de los sitios de memoria que se encuentran en estado de alerta por los despidos que se están realizando en el sector.
Así es como a las 14hs. se presentará la obra de teatro Como el caracol; para posteriormente, a las 15, se juntarán a pintar, razón por la cual sus organizadores le solicitan a quienes asistan lleven ropa cómoda, mate “y todo el apoyo a las y los trabajadores de nuestro Sitio de Memoria y Promoción de Derechos Humanos de la ciudad”
Luego que se conociera ese potencial cambio en el lugar, Organismos de Derechos Humanos de Mar del Plata Batán, expresamos su más enérgico “repudio y rechazo ante la reciente noticia del intento de instalación nuevamente por parte del Ejecutivo Municipal de un bar de gin en un lugar que fuera parte del centro clandestino de detención Ex ESIM “
Recordaron que “este espacio, que fue testigo de la violación sistemática de los derechos humanos, la tortura, la desaparición forzada y el asesinato de cientos de personas, debe ser preservado como un sitio de memoria, reflexión y homenaje a las víctimas, o reconvertido en un predio para la promoción de los derechos humanos de las nuevas generaciones”.
Afirman que “Transformar un sitio de tan alto significado histórico y dolor en un establecimiento comercial dedicado al ocio y la diversión es una afrenta a la memoria de aquellos que sufrieron y perdieron sus vidas allí. Es una falta de sensibilidad y consideración que atenta contra los principios fundamentales de derechos humanos y contra el deber de preservar la memoria colectiva”.
Es por eso que ratificaron su firme “oposición firme a cualquier iniciativa que banalice o mercantilice espacios que deben ser dedicados a la memoria y la educación sobre los horrores del terrorismo de Estado. Instamos a las autoridades competentes a tomar las medidas necesarias para impedir esta instalación y a garantizar la protección y preservación de todos los sitios históricos vinculados con la represión y la lucha por los derechos humanos”.
“Es imperativo que, como sociedad, mantengamos un compromiso firme con la memoria, la verdad y la justicia”.