El comunicado, firmado por los legisladores que abandonaron el bloque de LLA, si bien reconoce la investidura de Villarruel, discrepa con su mensaje en redes, al tiempo que cuestiona si con la misma lógica, Villarruel también pediría a otros legisladores que devuelvan sus bancas, en referencia a los diputados nacionales de la oposición que votaron el RIGI.
Asimismo, el comunicado resalta las diferencias de pensamiento entre Villarruel y Milei, advirtiendo que ellos (los diputados dialoguistas) nunca le pedirían a Villarruel que “devuelva el cargo” para el que fue electa.
El pronunciamiento señala: “No vamos a negar nuestras discrepancias con algunas decisiones del Gobierno nacional y sobre todo con los métodos y las formas que se eligen para llevar adelante una gestión que creíamos, sería de unidad nacional. Nos sentimos defraudados porque cuando fueron a buscarnos para encarar este nuevo proyecto político, y luego durante toda la campaña electoral, prometieron que íbamos por una manera distinta de hacer política y la verdad que no hacen ni más ni menos que lo que hacía el kirchnerismo”.
Además, criticaron la “hipocresía del gobierno nacional”, señalando que cuando dialogan para buscar consensos, es considerado un acto de “responsabilidad republicana”, pero cuando lo hace un gobierno opositor, como el de Kicillof, es visto como un fraude.
Finalmente, el comunicado apuntó directamente a Villarruel, señalando que sus recientes declaraciones no coincidieron con su actitud hacia Patricia Bullrich y Luis Caputo, quienes pasaron de ser duramente criticados a ocupar posiciones importantes en el gobierno.