Ricardo Alfonsín y Gustavo López convocan a una nueva construcción política en Buenos Aires

El dirigente radical Ricardo Alfonsín y el presidente de FORJA, Gustavo López, lanzaron en la ciudad de La Plata una convocatoria a construir juntos una Democracia Social.

Ambos expresaron que “en momentos de emergencia democrática es necesario encarar nuevas propuestas que convoquen a la esperanza desde los principios y las convicciones. Cuando la democracia está en juego, hay que actuar, no se puede especular”.

Nosotros somos todo lo contrario a lo que representa Milei, somos lo que Milei odia: somos progresistas porque creemos que la persona es el centro de la política, creemos en la libertad y en la Justicia Social. Creemos en la educación pública gratuita y de calidad, en la Universidad autónoma y en el rol del Estado para regular inequidades. Nos sentimos herederos del juicio a las juntas y el Nunca Más. Defendemos los valores republicanos y democráticos del Estado de Derecho, por lo que nos oponemos al DNU 70/2023 y a otorgar facultades delegadas inconstitucionales. Creemos en la ética de la solidaridad y que las convicciones no se negocian”.

Ricardo Alfonsín sintetizó que: “Desde el 2015, me siento más expresado por las posiciones de FORJA que por las de un partido que sólo nominalmente es radical y, no es casualidad, FORJA abreva también en el radicalismo histórico“.

Y agregó: “Compartimos la necesidad de crear una fuerza progresista, amplia y con fuerte arraigo en valores republicanos y democráticos. No descarto la posibilidad de que el partido abandone su alianza con la derecha y se sume al esfuerzo”.

Por su parte, Gustavo López manifestó que “FORJA representa la unión de los dos grandes movimientos populares del Siglo XX, y que su construcción en la Provincia de Buenos Aires, con el apoyo de Ricardo Alfonsín, será una alternativa para aquellos que comparten los valores de la Democracia, la ética, la transparencia y la solidaridad”. 

Durante el lanzamiento, los presentes se sumaron a la campaña nacional “Un millón de firmas contra el DNU”, un petitorio que a lo largo del país ya obtuvo miles de firmas para derogar y anular el DNU 70/23.