Una tendencia a la baja y a la gente de controlar el gasto. Sobre todo, por los aumentos de los servicios”.
En el marco de inestabilidad económica actual, desde “el Retrato…” recorrimos diferentes comercios para conocer cómo se vio afectado el sector panadero. En este sentido, dueños de locales brindaron su opinión sobre la actualidad y el futuro del rubro. Afirman que hay una tendencia a la baja y a la gente se controla en el gasto. “Sobre todo, por los aumentos de los servicios” afirmó uno de los entrevitados.
De esta manera, por la despensa Flora, local ubicado en Magallanes 6585, su dueña María Florencia Gerez, sostuvo que no “hubo cambios en los hábitos de compra de los clientes”. En esta línea detalló que “la gente sigue comprando pan a pesar de los aumentos. Además, los compradores no consultan el precio”.
A su vez, Gerez está al frente del negocio desde hace 10 años. “Si bien hay muchas panaderías por la zona, aumentó la clientela con los años”, aseguró y agregó que “la clientela es diaria, es gente del barrio. Y compran la misma cantidad de pan”.
“La gente controla sus gastos”
Por su parte, Marisa y Ana son las dueñas de la panadería y café Santa Rosa. Su local está ubicado en las Ferias Comunitarias Peralta Ramos, en avenida Jacinto Peralta Ramos 823. A diferencia de Gerez, ellas sí notaron un cambio en los hábitos de compra de los clientes respecto al pan. “Siguen comprando, pero no tanto”.
En esta línea, Marisa agregó: “mucha gente se mide en ese sentido, pero por suerte estamos trabajando bien y tenemos la venta diaria de siempre. No hemos tenido problemas hasta ahora”. Asimismo, afirmó que “se acerca gente nueva, pero tenemos la clientela de todo el año, que es gente del barrio”. En esta línea, también destacó que “al estar en la Feria, viene gente de otros lados también, o que les gusta el pan, les gusta la atención”. En Santa Rosa, el kilo de pan se vende a 1.700 pesos.
En cuanto a las facturas, la docena está a 3.700 pesos. Al igual que el pan “la gente sigue comprando, pero no tanto como hace unos meses atrás”, informó. “Se nota la baja, por supuesto. No en exageración, pero se nota”, agregó. Por otro lado, subrayó que “mucha gente compra según la plata que tiene o pide solo dos o tres pancitos. Todo suma hoy, y parece que el invierno va a pintar así. Una tendencia a la baja y a la gente de controlar el gasto. Sobre todo, por los aumentos de los servicios”.
“La gente era impulsiva y ahora se cuida”
Por otro lado, Martín, dueño de Les Grisett, panadería, pastelería y confitería ubicada en avenida Carlos Tejedor 2069 manifestó que “la baja en las facturas se nota un poco más que en el pan. Además, en todo lo que es pastelería y sándwiches de miga también se nota un poco más a comparación del pan, que medianamente todavía se sigue consumiendo”.
En este sentido, informó que “en las facturas, no llevan tanto como antes. Llevan menos cantidad”. Asimismo, aseguró que “la gente pregunta los precios. Si bien no los tenemos ni baratos ni caros, la gente pregunta. La mayoría que pregunta compra igual. Y son pocos los que preguntan y se van”.
No obstante, remarcó que “antes la gente venía y pedía una docena de facturas, era más impulsiva. Ahora se cuida, la gente se cuida. No deja de consumir, pero se cuida”. Asimismo, también precisó que “es poca la cantidad de gente que viene y pide por plata. La gente compra lo que va a consumir”.
Así, agregó que esta baja en el consumo “se fue dando de forma gradual y es medio estacional. Cuando la gente tiene plata, consume. Y cuando le aprieta un poco, se guarda. En las elecciones la gente se retrajo un poco en los consumos. Estaba pendiente de lo que iba a pasar. Después se soltó un poco y ahora se está retrayendo de nuevo por una cuestión de alcance. Se cuida, piensa que algunos lujos ya no se puede dar”.