El director de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires, Cristian Girard, aseguró que el proyecto de Ley Bases aprobado el lunes por la Cámara de Diputados nacional “conduce a una hiper-regresividad tributaria”, y sostuvo que “en el marco de una crisis fiscal potenciada por el sobreendeudamiento externo, el Estado renunciará a cobrarle impuestos a los sectores de mayor capacidad contributiva”.
Girard subrayó que el objetivo de Milei “es que la crisis la paguen los de abajo”, ya que con las reformas tributarias del proyecto “se consolida una apropiación de recursos por parte de los sectores más pudientes y concentrados en detrimento de los trabajadores y la clase media”.
En un hilo publicado en su cuenta @cristiangirard, de la red social X, el titular de ARBA destacó que al mismo tiempo que se beneficia a quienes poseen mayor capacidad contributiva, “se recortan gastos en políticas que impactan en una mejora en el nivel de vida de los sectores populares”, al tiempo que “se sostienen intactos los impuestos al consumo, que pagan en mayor proporción los argentinos de menores ingresos”.
Respecto de esto, resaltó que “el shock económico inicial propiciado por el gobierno de La Libertad Avanza, con devaluación, liberación de precios, freno a la obra pública, despidos, recorte a las jubilaciones y atraso salarial, dio lugar a una acelerada profundización de la desigualdad en la distribución del ingreso”.
Para Girard, el gobierno de Milei “es la fase superior del macrismo: va en la misma dirección, pero más rápido” y “profundiza la desigualdad”. En ese sentido, aseguró que “la moratoria, el blanqueo y la significativa reducción del impuesto a los Bienes Personales vienen a cristalizar esta inequidad distributiva que forzaron las reformas de Macri y el sobreendeudamiento externo, acuerdo con el FMI mediante”.
“El proyecto de Milei propone una moratoria con el fin de que el Estado nacional pueda hacer caja rápidamente y de alcanzar más rápidamente el superávit fiscal que reclaman los mercados y el Fondo. Como resultado de esto, a los grandes deudores se le condonarán multas e intereses”, afirmó.
“Complementariamente, se habilitará un blanqueo de ingresos evadidos y/o fugados, también con el objetivo de hacer caja en lo inmediato y conseguir dólares frescos para saciar a los acreedores externos y especuladores, de adentro y de afuera, beneficiando directamente a los evasores y fugadores con tasas mínimas o, incluso, nulas. Un premio para los que desfinanciaron al Estado y al país”, consideró Girard en su hilo de X.
En esa línea, insistió en que “para las personas más ricas, se crea un programa de pago anticipado del Impuesto a los Bienes Personales, que premia el adelanto del pago del período 2023-2027 con una reducción de tasas a casi cero, y una futura estabilidad tributaria hasta 2038. Para remate, esto irá acompañado también de la eliminación total del Impuesto a las transferencias de inmuebles”.
Girard sostuvo que el gobierno de Milei “busca dar seguridad jurídica a los inversores, fundamentalmente extranjeros y con un fuerte sesgo hacia actividades extractivas, con bajo nivel de agregado de valor local. El argumento es que así se generará confianza en el país y mejorará el clima de negocios, incentivando las inversiones”.
Sin embargo, el titular de ARBA alertó que “el nivel de inversión no depende del clima de negocios, sino del crecimiento económico. Entonces, los beneficios para los ricos y los sectores concentrados propiciados por el proyecto de ley ómnibus solo redundarían en una mayor transferencia de recursos desde abajo hacia arriba, y hacia afuera”.
Girard hizo hincapié en que esta reforma también castiga a las Provincias, “dado que caerá la recaudación de impuestos que son coparticipables, lo cual, sumado al desplome de la actividad económica, generará una inevitable merma en los recursos provinciales (tanto provenientes de la coparticipación nacional, como de la gestión recaudatoria local) y, por lo tanto, una mayor dificultad financiera para hacer frente a los gastos de funcionamiento esenciales”.
En el último posteo de su hilo en X, el director de ARBA ironizó respecto de que el hecho de “pagar con guita ajena es una constante en todos los aspectos que involucran cuestiones tributarias del proyecto: menos recaudación de impuestos coparticipables, más recursos para el tesoro nacional”.
“Ya lo confesó el propio Milei, cuando dijo que ´hay que barrer con el fisco en todas las dimensiones´. Acá no entiende el que no quiere”, aseguró Girard.