“Nos fuimos apagando. Parecía que si jugábamos dos días no íbamos a convertir”, manifestó el técnico de Alvarado, Mauricio Giganti, tras la derrota frente a Deportivo Maipú. Además, en conferencia de prensa, señaló que “lo más importante es que Santiago González se pueda recuperar” y advirtió que Ramiro Makarte “hizo una estupidez con pegar una piña sin pelota, cuando el rival estaba con diez jugadores” y que será sancionado.
En este contexto, Giganti informó que González recibió “un rodillazo en la cara. La recomendación médica fue que no ingrese. No obedeció y se metió en el campo. Se sintió mal de nuevo y por eso el árbitro finalizó el partido, la ambulancia tenía que trasladarlo”. Así, subrayó que “lo más importante es que se pueda recuperar. Que no tenga nada y se haga todos los estudios”.
Desde el club, manifestaron que González “sufrió una conmoción cerebral por un traumatismo encéfalo-craneano. Se encuentra estable y permanecerá en observación entre 24 y 48 horas”.
Respecto a lo futbolístico, Giganti detalló: “fue un partido, sobre todo en el segundo tiempo, que no pudimos resolver. Y, al contrario, nos complicamos por las malas tomas de decisiones, como la expulsión de Makarte”. De este modo, calificó la acción del jugador como: “la estupidez que hace Makarte con pegar una piña sin pelota, cuando ya el rival estaba con 10″. Además, al momento de la conferencia de prensa señaló que aún no había hablado con el jugador, pero que lo hará y que recibirá una sanción.
“Nos quedamos sin recursos, empezamos a desesperarnos y este es el quinto partido que nos convertimos y el quinto partido que nos encontramos la victoria. La primera derrota local”, preció Giganti. Así, agregó: “tenemos que salir de este pozo. Tenemos mucho por trabajar y mejorar. Nos fuimos apagando, un poco por la frustración y porque parecía que si jugábamos dos días tampoco íbamos a convertir”. No obstante, destacó el regreso de Tomás Rambert: “en las fases ofensivas es el jugador más desequilibrante”.
De esta manera, indicó que “hay que tratar de salir en estos momentos. Hace ocho fechas que venimos con cantidad de lesiones, con pérdidas familiares, con lesiones inesperadas. Supimos salir y ahora caímos en un pozo. Hay que cortarlo rápido. A mí me da tranquilidad que vi un poco más de fluidez en el juego. Me parece que el equipo conectó mucho mejor, dominó, fue profundo, pero no estuvimos certeros. Eso es lo que más me inquieta. No encontramos los caminos para contrarrestar esos diez rivales. Me parece que fue más ineficacia o incapacidad nuestra que virtud del rival“.
Por eso, para cambiar el panorama, Giganti afirmó que queda “levantar, trabajar. No encuentro otro método ni otra solución más que seguir tratando de fortalecer, agarrar más identidad, mejor juego. Convertir y defender. Por eso, nos encontramos en una situación que, si bien es merecida, no es la que esperábamos“.