Es un proyecto presentado por el concejal de Unión por la Patria, Diego García, que le solicita al intendente que arbitre los medios necesarios para coordinar con los proveedores de materiales de construcción el retiro de los sobrantes que se encuentren “depositados sin uso” en la vía pública.
“Es muy posible constatar la frecuente permanencia de bolsones de materiales de materiales, como arena, escombros o piedra, en las veredas de casas o edificios particulares, incluso tiempo después de la finalización de la obra en cuestión. Este es un problema que tenemos en la ciudad, que va en contra del ordenamiento urbano y la agilidad en la circulación y 
movilidad tanto de vecinos como de vehículos.”, destaca el concejal García (FOTO). Tomando denuncias de vecinos y vecinas de General Pueyrredon, una vez que la obra finaliza y los bolsones quedan en desuso, se suelen convertir en depositarios de residuos, transformándose así en microbasurales que tienen un impacto negativo sobre el ambiente, propagando focos infecciosos, en detrimento de la salud pública. “Mar del Plata es una ciudad con una importante afluencia turística, para que aquellos que tienen la posibilidad de vacacionar nos elijan temporada a temporada la ciudad se debe presentar de la mejor forma posible, incluyendo en ello lo que tiene que ver con la limpieza de la vía pública en su totalidad y con una estética urbana presentable, agradable para cualquiera que transite la ciudad. Si en un gran número de cuadras tenemos bolsones de material que complican el tránsito, afean la calle y juntan mugre tal objetivo en términos de transitabilidad, estéticos y sanitarios es imposible”, continúa García.
Las personas con discapacidad, las familias con niños pequeños y cochecitos de bebé y también las personas mayores son las principales afectadas ante esta situación, viendo obstaculizada su posibilidad de transitar libremente y exponiéndose a situaciones de peligro, por caídas que puede provocar la presencia de dichos bolsones o por verse obligados a descender a la calle donde circulan los vehículos. Este es un reclamo que vienen elevando por personas con movilidad reducida y requiere de una pronta y efectiva solución.
“Es importante que no vayamos en detrimento de las obras privadas de construcción, debe ser una legislación que contemple sus disposiciones exclusivamente para los casos en los que la obra se encuentra finalizada por los bolsones no fueron retirados. Los materiales abandonados, como la arena, la piedra o los escombros, podrían ser utilizados, por ejemplo, por el Municipio con fines comunitarios, así sea para el uso en plazas, asfaltados o engranzados de calles.”, finaliza Diego.
En tres artículos de comunicación, el proyecto se propone: solicitarle al intendente que coordine con los comercios proveedores de materiales de construcción el retiro de los bolsones que se encuentran sin uso sobre la vía pública; la realización de una campaña de concientización en redes sociales y medios de comunicación para sensibilizar a la población respecto de los daños al ambiente y a la movilidad que genera la presencia de los mismos sobre las veredas de la ciudad; y que se evalúe la posibilidad de que los propietarios puedan realizar su donación al Municipio, con el objetivo de que puedan ser utilizados para fines comunitarios tanto por el EMVIAL como por el EMSUR.