“Una aberración que va destruyendo la ciudad. Los bloques del Concejo Deliberante que aprobaron esto tendrán algún día que rendir cuentas por semejantes atropellos” afirma en una nota hecha llegar a este Portal por el periodista Nino Ramella, acérrimo defensor de la historia arquitectónica marplatense; luego que se conociera la autorización al proyecto para que en el predio Chateau Frontenac, se construyan dos torres de hasta 30 pisos con 266 unidades de vivienda, 231 módulos de cocheras y un paseo peatonal.
Ramella en afirma que “ Bajo la modalidad de “compensación” -es decir que si pongo plata puedo violar el código- ahora autorizan nada menos que dos torres de 30 piso en el predio del Chateau Frontenac. Es decir, han puesto a la venta las excepciones. Así nomás de atroz es lo que ocurre en Mar del Plata.
“Las excepciones que puede contemplar un código de edificación sólo pueden ser consideradas en caso de que su aplicación mejore el espacio urbano.”
“Liberan las alturas ¡nada menos que para treinta pisos de dos torres! a cambio de que mejoren las condiciones de una plaza. ¿Saben qué? Esa plaza volverá a tener que ser “mejorada” en muy poquito tiempo. En cambio esas dos torres con una proyección de sombra criminal en la costa, además de la modificación del paisaje urbano, la desaparición de un edificio patrimonial (por más que digan que algo de eso quedará), los vientos…en suma el desastroso impacto ambiental … van a durar generaciones y generaciones”.
Finalmente califica como de “inexplicable que semejante crimen no genere un escándalo de proporciones”.
LO QUE APROBARON LOS CONCEJALES
Cabe señalar que el predio Chateau Frontenac, también conocido como Villa Kelmis, está siendo desarrollado por un grupo de inversores de Buenos Aires y Uruguay. El proyecto consta de dos torres de hasta 30 pisos con 266 unidades de vivienda, 231 módulos de cocheras y un paseo peatonal. Se incluye la restauración del edificio declarado de interés patrimonial.
La primera etapa del proyecto, que implica la construcción de una de las torres, requerirá una inversión de entre 20 y 25 millones de dólares. La Secretaría de Obras municipal ha establecido un límite de altura para las torres, así como requisitos específicos para las cocheras, asegurando un mínimo del 85% de espacios de estacionamiento.
Se ha decidido destinar las compensaciones urbanísticas para la mejora de la Plaza Revolución de Mayo y también se dirigirán prioritariamente al Distrito Tecnológico. Las excepciones a las regulaciones estarán sujetas al inicio de las obras dentro de los dos años posteriores a la aprobación definitiva por parte de la Secretaría de Obras y Planeamiento Urbano.