“Nos sentimos abandonados”, afirmó José Luis Simón, guardavidas con más de 20 años de experiencia, de la playa pública Camet I. En diálogo con “el Retrato…”, expresó con preocupación que “esta situación no puede seguir así” y señaló que “todavía no terminó la temporada y está viniendo mucha gente a la ciudad”. Responsabilizó de la situación “a la Municipalidad y el Sindicato”, a la vez que pidió “públicamente que el Secretario de Seguridad, Rodrigo Goncálvez. Venga a ver el desastre que esto esta bajada y la playa llena de 4 x 4”
La situación de los guardavidas de Mar del Plata es cada vez más apremiante. Mientras la ciudad recibe a miles de turistas cada día, se multiplican las posibilidades de que alguna fatalidad suceda en los 42 km. de playa. “El abandono y desidia de las autoridades nos inquieta y alarma” afirmó José Luis Simón, guardavidas de las playas de Camet.
“El servicio no viene bien por diferentes razones. El tema puntual es que estamos cobrando poca plata y no nos suministraron los insumos necesarios para la actividad”, afirmó con angustia. Para los 42 km. de playa, General Pueyrredón cuenta con 750 guardavidas. Sin embargo, las tareas de prevención y rescate se complican al tener que realizarlas sin los elementos necesarios.
“El sindicato y la municipalidad son responsables”
“El sindicato y la municipalidad son responsables. Dicen que hay handies pero no los tenemos. Nos vemos obligados a comunicarnos por nuestros teléfonos particulares”, señaló Simón. Además, recalcó: “a muchos compañeros no les administraron ropa ni sogas. Hemos reclamado todo, cada guardavida debe tener sus elementos necesarios”. Además, instó a que cada guardavida pida los insumos a su encargado.
Asimismo, relató un incidente que podría haber sido fatal. “Tuvimos que hacer un rescate de dos niños (FOTO). Estábamos con dos víctimas dentro del agua, pero nuestros compañeros no nos podían asistir porque no tenían soga. Estuvimos 40 minutos en el agua y tuvo que venir la gente de los botes a rescatarnos a todos”.
“¿Cómo se soluciona? Con la administración de los insumos y que la Municipalidad ni el sindicato tergiversen la realidad. No pueden hacer política con una situación así. Además, el sindicato debe ponerse firme y exigir los elementos a la Municipalidad”, manifestó Simón. Asimismo, sobre el operativo de simulacro realizado en Varese a principio de mes, expresó que “fue una mentira. Ni handies hay, no hay nada”.
Otra preocupación para el guardavidas es la bajada marítima que existe en su balneario. “Es como una autopista para las 4×4”, expresó y narró que “hace unos días, una camioneta 4×4 casi pisa a una nena que estaba jugando en la orilla”. Ante esta situación urgente, Simón presentó una nota al intendente Montenegro notificando el “incumplimiento y violación sistemática de la Ordenanza Municipal 14269”.
Desde “el Retrato…”, recordamos que dicha Ordenanza en el Capítulo V se establecen “restricciones a usuarios y a las actividades deportivas”. Así, dentro del Artículo N° 13, el inciso F indica “autos, camionetas, cuatriciclos, motos, etc. Se prohíbe el acceso, tránsito y permanencia de dichos vehículos en el sector de arena. Quedan exceptuados de ello, los lugares en donde la autoridad de aplicación permita desarrollar actividades que necesiten la utilización de dichos rodados”. Asimismo, el Capítulo VI establece sanciones. De este modo, el Artículo N° 14 indica “el incumplimiento a las prescripciones de la presente será sancionado con multa del 1 al 70% y/o, de resultar pertinente, con clausura de hasta noventa (90) días, todo ello bajo el régimen previsto en la Ordenanza 4544- Régimen Municipal de Faltas”.
Sin embargo, Simón señaló: “nos dijeron que iban a solucionarlo, pero no solucionaron nada”. Además, remarcó que “no hay policías. El otro día nos amenazaron con un cuchillo para pelearnos. Llamamos a la policía y no viene. El Secretrio de Seguridad, Rodrigo Goncalez nunca vino, ni siquiera a ver el descontrol con la bajada de vehiculos”.
Mientras suceden todas estas situaciones, marplatenses y turistas asisten a las diferentes playas de la ciudad, y la preocupación de guardavidas como Simón crece día tras día.