Xavier Marcone calificó como de “una buena medida” el DNU sobre la Ley de Alquileres

Con la publicación del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) en el Boletín Oficial, el reconocido martillero marplatense, Xavier Marcone, sostiene que el DNU de Javier Milei “es una buena medida” para el mercado inmobiliario.

Este DNU, de 366 artículos, abordó, dentro de su paquete de medidas, una cuestión central para el ámbito inmobiliario, la Ley de Alquileres. Desde “el Retrato…”, dialogamos con Marcone, para conocer su visión y el impacto que tendrá en el mercado de bienes raíces.

Este decreto “permite negociar libremente entre las partes, locador y locatario. Negociar plazos, negociar forma de pago, negociar moneda de pago, negociar índice de ajuste. Creo que esto hace que el mercado inmobiliario sea más distendido, más ágil y esto va a hacer que los alquileres, no digo bajen porque la inflación es descomunal, pero creo que se van a estabilizar. Es una buena medida”, afirmó Marcone.

Con la derogación de la ley, una preocupación latente para los inquilinos es la imposición de condiciones por parte de los propietarios. Consultado por si esto será así o si el propio mercado equilibrará las condiciones, el martillero marplatense, expresó: “Nadie obliga. Si vas a comprar un auto negocias la forma de pago, negocias de acuerdo a tus posibilidades. Si lo podés pagar, compras. Si no lo podés pagar, el vendedor se guarda el auto o se lo vende a otro. Esto me parece excelente, que yo pueda negociar mi alquiler y que le sirva al propietario y que le sirva al inquilino.”

Además, agregó: “no podemos condenar a un propietario a que ajuste el alquiler una vez por año. Es lo mismo que contratar un empleado y decirle que va a cobrar lo mismo todo el año, salga pato o gallareta. Y así, el tipo queda condenado a ser un esclavo durante un año. No. Está mal. Menos en una época inflacionaria como ahora.”

En este sentido, Marcone remarcó que el DNU traerá cambios significativos para los propietarios. “Administro unos 300 alquileres, el 82% de mi cartera de vivienda, son jubilados. No pensemos solo en el inquilino, pensemos también en el propietario que es jubilado. Y que, para él, el ingreso por alquiler es como si fuera alimentos. Que él pueda negociar libremente con su inquilino cómo va a cobrar su renta es fundamental. La ley anterior condenó al jubilado que hizo en toda su vida un departamentito, una casita. Lo condenó a cada vez cobrar menos, cada vez comprar menos comida, pagar menos servicios. Creo que esto lo va a regularizar”

En cuanto al mercado inmobiliario en la ciudad de Mar del Plata, el martillero estimó que saldrá beneficiado con este DNU. Pero aclaró: “Mar del Plata tiene un tema particular. La gente que tiene una unidad disponible en verano la alquila o trata de alquilar en temporada y después en marzo, abril las pone en locación todo el año. Algunos las tienen en locaciones para los estudiantes que es de marzo a noviembre también. Mar del Plata tiene un gran afluente de estudiantes que vienen del interior de la provincia, que son universitarios la mayoría. Los contratos temporarios tenían un máximo de seis meses con una carga tributaria del 5%. Ahora esto lo libera. Tiene un fin específico. El estudiante que viene a estudiar y necesita la casa o departamento de marzo a noviembre, a lo sumo diciembre. Entonces, esa casa o departamento entra en la locación temporaria. Esto está perfecto. Ahora está perfectamente regulado.”

Respecto a los contratos que el Colegio de Martilleros no había sellado, el martillero explicó: “el Colegio de Martilleros tiene un convenio con ARBA — Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires — por cual uno cuando sella los contratos de vivienda, le cobra el 1% sobre el total del contrato. Hace dos meses, la directiva del Colegio de Martilleros, dio una instrucción para que solo se sellen los contratos que estaban de acuerdo a la ley. Esto era ajuste anual, índice de casa propia y vigencia por 36 meses. No se pudieron sellar los contratos que eran prolongaciones de contratos anteriores o anexos en los cuales ya estaba pactado un índice distinto, una periodicidad distinta a la ley como eran el RIPTE — Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables— y el IPC —Índice de Precios al Consumo—, que la ley anterior lo daba, no el índice de casa propia, entonces esos contratos no los sellaba. Esto nos obligó a sellarlos en ARBA, para lo cual, en lugar del 1%, le tuvimos que hacer pagar a la gente el 1,2%. Es decir, un 20% más de sellado por una disposición interna del Colegio avalada por ARBA. Ahora esto seguramente lo tengan que modificar.”