Se realizó la fiesta patronal de la parroquia de la Asunción de la Santísima Virgen presidida por el Obispo Diocesano, Gabriel Mestre que se despidió de la que fuera su primera parroquia como sacerdote.
Portando la imagen de la Virgen, la comunidad realizó una procesión por las calles del barrio del hospital Materno con canticos y rezos.
Luego se realizó la Santa Misa presidida por Mons. Mestre y concelebraron los sacerdotes de la parroquia.
Homilía de Gabriel Mestre
El Obispo en su homilia nos recordó las palabras de María «Estoy aquí y soy tu madre».
Este lema cortito y contundente nos invita a la fiesta que nos da tres motivos de alegría, dijo el obispo «Los tres motivos son la fiesta de la fe, la fiesta de la misión y la fiesta del servicio.
La fiesta de la fe, estas dos mujeres manifiestan la fiesta que hoy celebramos. Este templo en donde el sacramento de la reconciliación nos permite vivir la fiesta de la fe en cada acto litúrgico de esta comunidad. En medio del dolor del hospital de niños no dejemos de celebrar la fiesta de la fe.
La segunda fiesta es la de la Misión, compromiso que asumimos para tocar el corazón de cada vecino. Veo las intenciones de los vecino que en la misión Uds han recogido en estos días en varias cajas y me llena de emoción.
La tercera de las fiestas es la del servicio y que tiene el nombre propio: casa de Bethania. En honor a la Virgen Bethania es el lugar físicos propio del servicio a la comunidad que va a concentrar toda la ayuda de esta parroquia a los necesitados del hospital y del barrio.
Está es la fiesta de la Virgen que abraza la fe, la misión y el servicio. Cuidemos el templo, el barrio, el hospital y a Bethania como lugar de misión.
Hoy es mi última Misa que comparto en esta parroquia donde fui párroco y pastor. Los conozco como comunidad y les agradezco que hayamos podido compartir juntos este tiempo.
También agradezco al párroco el padre Luis, que además me acompaño como Vicario General de la diócesis desde que asumí como Obispo hace 6 años.
No olvidare a esta parroquia donde fui párroco y dónde descansan los restos de mi madre y varios parientes en el cinerario. Les aseguro que están en mi corazón y no olvidare está parroquia de la Asunción», finalizó el obispo.
Despedida del diácono Marcelo y Sandra
El Obispo Gabriel despidió a Marcelo Lovera y Sandra y recordó cuando hace 21 años comenzaron una tarea de evangelización. Ahora continuarán su tarea misional en Córdoba y la comunidad los despidió con un gran reconocimiento por el bien que han realizado en esta diócesis.
Por último toda la comunidad hizo un gesto de bendiciones para Mons Mestre, pidiendo por su nueva misión en el arzobispado de La Plata.
Por último, miembros de la comunidad dieron un mensaje de despedida a Mons Mestre.
Al término de la celebracion la banda de la Armada Argentina entonaron marchas militares en honor a la Virgen.
Fotos: Elena Navas