El jefe de Gobierno porteño y precandidato presidencial de Juntos por el Cambio, Horacio Rodríguez Larreta, encabezó esta tarde en la localidad bonaerense de Tres de Febrero su primer acto de campaña, en el que presentó sus propuestas electorales junto con su compañero de fórmula, el dirigente de la Unión Cívica Radical (UCR), Gerardo Morales.
“Les vamos a contar a todos los argentinos cómo les vamos a cambiar la vida. Buscamos terminar con el kirchnerismo para siempre. Para eso vamos a impulsar un cambio profundo, que sea un cambio que se mantenga en el tiempo”, afirmó en tono halcón, Larreta.
A su vez, Larreta destacó a su precandidato a vicepresidente para las próximas elecciones, el gobernador de Jujuy Gerardo Morales, el cual la semana pasada estuvo en el foco de la escena por la represión policial contra los manifestantes jujeños que protestaban por la reforma constitucional de la provincia.
“Gerardo (Morales) es un tipo que se la banca. Lo demostró no solo esta semana; que lo vimos todos, que se la bancó con mucho temple, equilibrio y diálogo. También se la bancó cuando metió preso a Milagro Sala y a la Tupac Amaru, que tenían un gobierno paralelo en Jujuy. Ese es el modelo que representamos”, sentenció Larreta.
En este marco, Larreta dio comienzo a su campaña a 45 días de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), en donde enfrentará en las urnas a la otra precandidata presidencial de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich.
Por eso, Larreta adelantó que este mes y medio antes de las PASO estará “recorriendo el país” para que todos los argentinos conozcan sus propuestas, las cuales giran en torno a tres pilares: educación, seguridad y trabajo.
Con respecto a la educación, Larreta estableció que su programa electoral para las PASO tiene un plan de clases de 190 días, que es el que actualmente rige en la Ciudad de Buenos Aires, que a su vez contempla una jornada extendida para el alumnado con problemas de aprendizaje.
En ese sentido, apuntó a los gobiernos kirchneristas de Santa Cruz y Buenos Aires, encabezados por Alicia Kirchner y Axel Kicillof respectivamente, al marcar que en la provincia patagónica “los chicos tuvieron más días de paro que de clases”, y que en las escuelas bonaerenses “las escuelas se caen a pedazos y están sin conectividad”.
En cuanto al trabajo, Larreta remarcó que la meta de su hipotético gobierno será “que cada micro, pequeña y mediana empresa contrate al menos a una persona más”. “Si lo logramos, en un solo mandato de cuatro años, el empleo privado puede crecer lo mismo que creció en los últimos 13″, prometió.
Para llevarlo a cabo, Larreta propuso eliminar trabas, impuestos y trámites, aumentar la producción y las exportaciones, impulsar nuevas reglas laborales, terminar con la industria del juicio y transformar los planes sociales en trabajo.
En materia de seguridad, Larreta hizo énfasis en la lucha contra la delincuencia, y anunció que creará un cuerpo de elite para perseguir y meter en prisión a los narcotraficantes. “Hoy en la Argentina se vive con miedo. El Gobierno nacional mira para el otro lado mientras nos asaltan, nos roban y nos matan”, advirtió.
“Vamos a trabajar por una Argentina segura que tenga policías capacitados, entrenados, y equipados con la última tecnología para cuidarte de los delincuentes. Con sistemas de vigilancia en cada ciudad, con el combate al crimen organizado con todas las fuerzas de seguridad, y con la construcción de cárceles de máxima seguridad para aislar e incomunicar a los líderes narcos y recuperar las calles”, aseguró Larreta.
Por último, en el último pasaje de su discurso, Larreta prometió que no se meterá “en la politiquería” durante la campaña por las PASO, y certificó que presentará una propuesta por día durante el próximo mes y medio.
“Esa es la campaña y dos veces por semana vamos a profundizar el plan de gobierno en cada una de las áreas. Vamos a ir al detalle, con números, datos y diagnósticos”, concluyó Larreta.
Con esta alocución, Larreta ya comenzó a diagramar su postura frente a las inminentes PASO, que pareciera ser la constante contraposición contra el kirchnerismo.
Sin embargo, Larreta no solo buscará ganarle al oficialismo en las urnas, sino también imponerse contra su más acérrima rival en la interna opositora, Patricia Bullrich, que comenzó a ganar terreno electoral luego del fallido intento del jefe de Gobierno porteño para sumar al saliente gobernador peronista de Córdoba, Juan Schiaretti, a Juntos por el Cambio.
Ahora, Larreta deberá emprender una campaña electoral a contrarreloj, siguiendo con sus críticas a Unión por la Patria, bloque que viene golpeado luego de salir a duras penas de una cruda interna, y de esquivar los dardos que le lanza Bullrich, que nunca cesó de confrontarlo por su poca dureza, en contraposición con el sector halcón de Juntos por el Cambio.