
A poco de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias, uno de los máximos referentes del peronismo local, Antonio Tanzi, en diálogo con “el Retrato…” aseguró que el partido ha mutado con los años y que actualmente “se eliminó un proyecto de país y se generó una grieta que se fue agrandando en el tiempo, la cual llega a ser muy importante hoy en día”
Uno de los máximos referentes del peronismo local, Antonio Tanzi, en diálogo con “el Retrato…” analizó la situación actual del Partido como así también recordó sus inicios, los cambios que se han dado a lo largo de los años y habló de la “grieta” se que generó con el paso de los años. Además, se refirió a lo que pasa en otros países del mundo.
“Ha habido un cambio tan grande en la ciudad, en el mundo y en el país que ha llevado a replantearse a la sociedad muchas cosas. El Peronismo nace como respuesta a una situación social del siglo pasado, en el marco de una sociedad totalmente distinta a esta, dando una serie de respuestas a una serie de injusticias y generando un desarrollo y un modelo de país que dio respuestas durante 40 o 50 años”, explicó.
En tal sentido, Tanzi remarcó que el país llegó a estar “pionero” en el mundo en ese entonces, porque se daban respuestas políticas, económicas y sociales a toda una crisis general de post guerra. “Todo se fue destruyendo, se eliminó un proyecto de país y se generó una grieta que se fue agrandando en el tiempo, la cual llega a ser muy importante hoy en día”, indicó.
“La grieta se está dando en todo el mundo, no es un problema solo de los argentinos, pero lo que nos falta actualmente es que no estemos mirando más allá de la nariz. La inflación está en todos lados y la pobreza tiene que ser corregida en todo el mundo, conforme lo manifiesta incluso el Papa”, sostuvo y agregó: “Hay una sociedad mundial que no tiene un proyecto político, que dé respuestas a la situación de injusticia y económica y social que se está dando en todos lados”.
Asimismo, Tanzi señaló que la Argentina, “a través del peronismo, tuvo una sociedad distinta, porque se fue dando una respuesta diferente: se organizó a la clase de trabajadora, sin hacer una lucha de clases” y agregó: “Fuimos capaces de dar una respuesta uniendo el capital y el trabajo”.
“Las nuevas generaciones no tienen conciencia de esto y están viviendo en un mundo donde, por el desarrollo tecnológico, se trabaja con la inmediatez: la situación laboral cambió y la tecnificación va generando una desocupación cada vez mayor, porque la concentración del poder económico va desplazando a aquellos sectores que no llegan a tener una inserción cultural”, apuntó el reconocido dirigente peronista.
-¿Cómo se encuentra una salida a esta situación?
-Lo primero que hay que hacer es deponer actitudes personales: los políticos como políticos y la sociedad como sociedad. No podemos seguir haciendo un Boca/River, en el sentido que estamos enfrentados unos con otros de una forma ridícula. No es un problema partidario, porque los partidos hace rato que no existen. Se votan alianzas o amontonamientos de gente, donde paisanos de todos los pueblos se juntan para dar una lucha contra el poder, pero que no te dicen lo que están proponiendo. La sociedad quiere salir de esto, no sabe cómo, tampoco quiere hacer el esfuerzo y quedó muy dañada, después de una represión brutal como la de la última dictadura militar.
“Hay que replantearnos qué país que queremos, en qué mundo estamos insertos y cómo salimos. Falta gente con capacidad de decirnos el proyecto que tienen como presidente, partido o gobernador. Hay que hablar de cómo se reparten los dividendos para que a la sociedad le quede un pedazo que le de bienestar y trabajo. Hoy se está discutiendo quién se va a hacer cargo de la torta: los chinos o norteamericanos”, sostuvo.
Por último, el reconocido dirigente peronista expresó: “Somos muy dependientes económicamente. Hay que patear el tablero, pero con un pueblo que responda, que tiene que saber que sin sacrificio no hay salida. Divididos es imposible. Capacidad económica e intelectual tenemos, pero está faltando sentarnos y analizar de qué manera realmente tenemos que asociarnos como argentinos: desarrollar un proyecto nacional, sentarnos en una mesa y ver cómo negociamos nuestra propia salida”.