En el marco de una iniciativa impulsada por el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), el Sindicato de Cadetes, Motoristas y Mensajeros (SICAMM) y organismos en defensa de personas que padecen Trastorno por Déficit de Atención (TDA), se inició una campaña en Mar del Plata, “Tu escape hace daño”, para evitar ruidos que afecten a distintas personas y en especial a aquellas que sufren autismo.
En ese contexto, el Secretario de Acción Social de SMATA, Marcelo Cappelli, dialogó con Rosana Tortosa en su programa “En la misma vereda” por FM del Sol 100.7 sobre los detalles de la mencionada campaña y sobre cómo este impacto ambiental afecta principalmente a pacientes con hipersensibilidad auditiva o sensorial e irrumpe en su bienestar biopsicosocial, generando consecuencias en las personas autista como ser taparse los oídos, ansiedad, miedo y huida (https://youtu.be/fVN5dsnmTNs).
Frente a ello, Cappelli indicó que el daño acústico se debe fundamentalmente a estruendos que provienen de los caños de escape vehiculares y que, por ello, el propósito de este conjunto de acciones es apoyar una propuesta para eliminar los escapes ilegales, poniendo énfasis en el sistema de corte que genera contra explosiones y en consecuencia ocasionan un daño equivalente al de la pirotecnia.
En este sentido, el dirigente gremial detalló que las motos salen de fábrica con un escape que está aprobado bajo exigencias con ciertos niveles de ruido y que este elemento de la moto es imprescindible para superar las periódicas verificaciones técnicas. “Cuando se le saca el escape original a una moto ya estás en infracción. Si encima se le suma un elemento para generar contra explosión, la infracción es mayor”, sostuvo.
Conforme a ello, Capelli (Foto) indicó que los estruendos de los escapes pueden tomar desprevenidas a las personas con TEA y provocar graves daños o consecuencias como así también señaló que los casos de jóvenes que se golpean contra las paredes, o incluso auto flagelamiento, fueron motivo de la campaña. “Nos afecta a todos, pero el evento traumático de ver una criatura autoflagelándose la lengua porque se juntaron tres repartidores en una esquina no se lo deseo a nadie”, señaló.
Así, Cappelli explicó que se inició una distribución de folletería en las que solicitaban a les comerciantes que, previo a dar trabajo, “verifiquen que clase de escape tienen los repartidores que van a distribuir sus productos” y que también se difundió información en las casas de repuesto de moto para revertir o minimizar el ruido de las explosiones. “Queremos concientizar a ese comerciante y a la persona que está arriba de la moto que producen mucho daño en serio”, sostuvo.
Seguidamente, Cappelli describió que existen más de 1.800 motos repartiendo en Mar del Plata y que el hecho que todos los actores se involucren para que estas personas puedan ponerse en lugar del otro es la acción que más conciencia puede generar en estas personas. “Ningún control de tránsito puede ser más efectivo que esto”, aseguró.
“Si logramos educar la compra, después que la persona venda o no el respuesto es secundario. Tratamos de educar al que va arriba de la moto, al que vende el repuesto y al comerciante que da trabajo, que tiene responsabilidad, porque tiene que verificar con qué escape sale su empleado. No queremos sacarle la moto a nadie, porque en muchos casos es su herramienta de trabajo, sino que pasa por concientizar para que puedan tomar dimensión del daño que hacen, porque el día de mañana pueden tener un hijo con esta patología”, sostuvo.
Por último, el referente gremial cuestionó que muchas aplicaciones de reparto de comidas como “Pedidos ya” y “Rappi” “dejan mucho que desear” y comentó que se encuentran trabajando en el marco de un proyecto de ley que va en contra de las mismas. “Estamos tratando de concientizar y proteger a los compañeros que andan arriba de una moto bajo la premisa que el día de mañana pueden ser papás y tener un nene con autismo. La idea es que la empresa controle el vehículo, porque se pueden ganar la vida sin hacer daño”, expresó.
“Ni bien comience el ciclo lectivo se dará una charla para que la gente empiece a darse cuenta. Son personas que no eligieron nacer con eso y son criaturas muy sensibles a esto. Hay que concientizar”, concluyó el impulsor de la iniciativa a la vez que pidió colaboración a toda la comunidad y aseguró que el ruido de escape de las motos y las contra explosiones genera mucho más daño que la pirotecnia en los chicos con esta patología, incluso.