El Obispo Gabriel Mestre presidió la misa a 25 años de la muerte de Eduardo Pironio

En una Catedral colmada de fieles, el Obispo Diocesano monseñor Gabriel Mestre presidió la Santa Eucaristía al cumplirse el 25 aniversario del fallecimiento de monseñor Eduardo Pironio, segundo obispo de nuestra diócesis.

La misa fue concelebrada por el párroco de la Catedral, el padre Ariel Sueiro y demás sacerdotes de toda la diócesis que se acercaron a compartir la Eucaristía.

En su homilía, monseñor Mestre se refirió a “cómo en el Evangelio de hoy Jesús juega con las metáforas de la Sal y la Luz. El obispo nos llamó a reflexionar en cómo el Señor nos llama por medio de nuestra vocación a ser Sal de la Tierra y Luz del Mundo en nuestras comunidades, en nuestras vidas”.

Al finalizar la celebración el obispo realizó una oración particular en recuerdo del Cardenal Eduardo Francisco Pironio y pidiendo por su proceso de beatificación. Luego, bendijo a todos los miembros de la Pastoral Vocacional y de la Comisión Animadora para dar a conocer la causa de Mons. Pironio quienes organizaron la eucaristía.

También impartió la bendición con agua bendita a los integrantes de la Pastoral de Juventudes quienes hoy llevaron a cabo su encuentro de planificación anual y a las Hermanas Siervas de la Misericordia de Dios quienes cumplieron un año en nuestra diócesis.