En el marco de la situación económica que se encuentra atravesando el país, producto de la inflación y las oscilaciones en el valor del dólar, el presidente de la Federación de la Industria Naval Argentina (FINA), Domingo Contessi, en diálogo con “el Retrato…” manifestó su preocupación por la situación del sector y apuntó: “Se atendió solamente un sector, el sojero, para que liquidara divisas, pero la realidad es que todos los sectores exportadores, especialmente los industriales están muy complicados”.
Luego de la conmemoración del Día de la Industria Naval Argentina, que se celebró este lunes en todo el país, el presidente de la Federación de la Industria Naval Argentina (FINA), Domingo Contessi, en diálogo con “el Retrato…” analizó la situación que se encuentra atravesando el sector, los cambios que se han producido en la industria y lo que se viene. “Venimos de una situación de resurgimiento por la renovación de la flota pesquera, con mucho trabajo, realizando muchas botaduras y con astilleros con muchas órdenes de construcción”, sostuvo.
“Por un lado, tenemos una realidad de trabajo y una proyección de futuro importante, pero por otro lado hay una coyuntura muy compleja. Si hoy tuviera que cotizar un presupuesto no puedo hacerlo”, apuntó al mismo tiempo que aclaró que esta situación comenzó en 2021, donde hubo un atraso cambiario “muy grande”.
“Los importadores de insumos que desconocen a qué cotización podrán reponer su mercadería, la terminan cotizando a dólar MEP. Nuestra industria se quedó con sus ingresos en dólares oficiales y parte de sus costos en dólar MEP o con incrementos siderales”, explicó y remarcó que “estos últimos meses de inestabilidad terminó de trastocar tocar” y agregó: “Tenemos los ingresos a dólares oficiales y muchos de nuestros costos son a valor de dólar MEP”.
En ese contexto, Contessi señaló que “se atendió solamente un sector, el sojero, para que liquidara divisas, pero la realidad es que todos los sectores exportadores, especialmente los industriales están muy complicados”.
Al ser consultado por “el Retrato…” sobre si dicha situación puede frenar la construcción de nuevos barcos, respondió que, a diferencia de otras industrias, la naval es una industria con una lógica distinta, porque es a largo plazo. “Hacer un barco hoy, implica una decisión tomada hace dos años atrás. No se puede paralizar a un cliente que ya tiene pagado un porcentaje de la embarcación”, expresó.
“Hoy estamos trabajando a remito abierto; es decir, se entrega la mercadería y después se ve cuando sentarnos a discutir para renegociar. No se puede seguir así, es jugar a la ruleta rusa”, expuso al mismo tiempo que aclaró que la mayor preocupación del sector es el factor del largo plazo.
En función de ello, pidió por la pronta estabilidad y recuperación de la economía. “Me pregunto cómo queda la competitividad del sector después de ello, porque cada vez que han pasado estas situaciones de atraso cambiario quedamos con una situación de competitividad más deficiente”, remarcó y consideró que un plan económico correctamente implementado puede ser una posible salida a la situación que se encuentra atravesando el sector.
“Hoy está todo supediato por las restricciones presupuestarias y en el corto plazo duele mucho, pero da una esperanza que en el largo plazo se empiecen a hacer las cosas un poco mejor para ordenar y contener la inflación. No debería volver a suceder lo que pasó en 2021 en 2023”, completó.
-¿Cómo se hace para mantener un equipo de trabajo con esta situación?
-Hoy tenemos una realidad crítica que no podemos dejar de mencionarla, pero nosotros seguimos adelante. Estamos contratando más gente y continuamos haciendo inversiones, porque confío en que esto es una situación coyuntural que se va a arreglar. Hoy no podemos parar. Preocupa igualmente porque en la historia se ha visto muchas veces esto y varios astilleros navales se han fundido, incluso, en su mejor momento, porque estas contingencias te llevan puesto.
En ese contexto, afirmó que la situación que se encuentra atravesando el sector “es compleja”, en tanto “los costos laborales se incrementan muchísimo y el dinero a la gente le alcanza cada vez menos” y agregó: “La inflación nos lleva al peor de los mundos. La inflación es un flagelo que hay que combatir, no con soluciones mágicas, sino con políticas claras”.