La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, afirmó este martes que el Gobierno nacional no evalúa impulsar una ley para penar los discursos de odio, luego de que esta información fuera reproducida por algunos medios de comunicación y criticada por la oposición.
“No estamos analizando ninguna legislación contra los discursos del odio”, declaró Cerruti en las últimas horas tras el reclamo de varios integrantes del Frente de Todos por avanzar en esa dirección y del rechazo de figuras opositoras de Juntos por el Cambio.
En palabras de la funcionaria del Gobierno nacional, en la gestión del presidente Alberto Fernández “no hay ningún proyecto analizando que vaya en línea con lo que dicen” respecto a una ley para limitar los discursos de odio.
Tras desmentir que el Gobierno estudia una ley contra los discursos de odio, la portavoz indicó que “legislación existe; tenemos que ver de qué manera este debate público lo conducimos de la mejor manera posible para ponernos de acuerdo en no correr las barreras de la convivencia democrática”.
“Lo que hay que hacer es cumplir con la legislación vigente y poner en debate de qué estamos hablando cuando hablamos de discursos de odio”, sostuvo la funcionaria en las últimas horas.
En línea con su planteo, Cerruti recordó que el Código Penal “incluye la incitación a la violencia y discriminación política”, por lo que “no hay que legislar nada sobre el discurso de odio” sino “cumplir lo que hay”.
La idea, que formularon distintos actores del Frente de Todos, busca prevenir los discursos mediáticos de odio que luego devienen en situaciones de violencia contra ciertos partidos políticos.
A partir de la iniciativa, la coalición oficialista planteó estos últimos días “restituir la ley de medios” o avanzar en algún tipo de “legislación que limite los discursos de odio”.
En esa sintonía, ayer en la Legislatura bonaerense la diputada Susana González y el camporista César Valicenti, siguieron la misma senda que otros integrantes del Frente de Todos e impulsaron en el recinto una ley contra los discursos de odio.
“El odio es un sentimiento muy profundo que tiene un efecto sobre el resto, más si se trata de una persona con algún grado de popularidad… aunque no les guste (a la oposición) hago responsables a los representantes políticos, los medios y la Justicia”, sostuvo González y luego destacó que “las libertades no son irrestrictas, la libertad de expresión tampoco”.
En tanto, Valicenti expresó que “el discurso de odio construye sentido común y subjetividades violentas” y preguntó retóricamente “¿Por qué no discutir una ley de medios que regule el nuevo espacio público?”.
Frente a las ideas del oficialismo, medios de comunicación y actores de la oposición como el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, salieron al cruce para oponerse a la supuesta “ley de odio”.
“El kirchnerismo intenta distraer y propone una ley mordaza”, disparó Larreta después conocer las intenciones de buena parte del oficialismo que este martes por la mañana desmintió la portavoz presidencial.
Según Larreta, lo que propuso en los últimos días la gestión del Gobierno nacional es “controlar la libertad de expresión”, algo que desde la oposición manifestaron que no van a permitir.