El presidente Alberto Fernández visitó en la tarde de este viernes a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en su domicilio del barrio porteño de Recoleta, donde permaneció casi una hora, tras el atentado que la expresidenta sufrió anoche cuando un hombre gatilló un arma cargada a centímetros de su cabeza.
El jefe de Estado arribó a las 14 al departamento ubicado en Juncal y Uruguay y se retiró 45 minutos después, sin realizar declaraciones a la prensa.
Fernández encabezó en la mañana del viernes una reunión del Gabinete nacional en la Casa de Gobierno, en la que se analizó el “estado de conmoción social derivado” del intento de asesinato de la vicepresidenta.
Mientras tanto, desde las primeras horas de este viernes una multitud se fue concentrando en las inmediaciones de la Plaza de Mayo para expresar su respaldo a Fernández de Kirchner y repudiar el “ataque a la democracia”.
En tanto, el mandatario convocó a representantes de sectores sindicales, sociales, empresariales, de derechos humanos y distintos credos para “constituir un amplio consenso contra los discursos de odio y violencia”.