Hay que subir a todos al colectivo, después vemos quien maneja y quien cambia las gomas. Esa es la lógica que el radicalismo está teniendo de la mano de Maximiliano Abad. Así es como los cercanos a él explican el nombramiento de Guillermo Schütrumpf, alguien que algún momento, lejano, formó parte de las filas de la UCR, pero después desfiló por varios partidos políticos. Este lunes, 3 de enero, Schütrumpf ya sería oficialmente nombrado y comenzaría la jornada con varias reuniones que ya le pautó su edil Marianela Romero. “El único sector que está enojado es el de Vilma, porque cuando Guillermo asumió como Secretario de Desarrollo Social, después de Baragiola, le revisó todos los papeles y tenía muchas desprolijidades en su poder que no dejamos que salgan a la luz”, confesó un correligionario a este medio.
Fernando Muro sigue buscando su oficina en el Deliberante
Las oficinas de los Concejales, en su gran mayoría están ubicadas en el mismo piso según los bloques. De esta manera en el primer piso del Concejo están todos los ediles del Frente de Todos y los dos ediles del Bloque Crear Juntos, en el tercero están los radicales y algunos del PRO y en el cuarto está dividido entre Acción Marplatense, y otros ediles oficialistas. Al asumir como concejal, alguien debería explicar esto mismo a los nuevos concejales. Muro nunca se enteró tanto es así, que estaba golpeando cada oficina del tercer piso en busqueda de la oficina de Virginia Sívori. No hay remate.
Las Comisiones Internas del Concejo siguen dando que hablar
“Ya me banqué dos años de pandemia, con el kirchnerismo presidiendo la comisión, que pongan lo que tengan que poner, pero que negocien bien las presidencias de las comisiones” dijo una funcionaria de primera línea, al ser consultada en off por la rosca del concejo. Es lógico, la discusión interna por la mayoría o presidencia de las comisiones son más importantes de lo pensado, porque en muchos casos, cuando están presididas por la oposición, funcionan de “contralor” de las secretarías y entes descentralizados. Con pedidos de informes o citaciones le marcan la cancha a los funcionarios.